El conflicto entre las tres empresas propietarias de la central nuclear de Almaraz se encuentra en punto muerto. Pese a que José Bogas, consejero delegado de Endesa, ha manifestado en un encuentro con los medios que "están todas las posibilidades abiertas", ha dejado claro que **"todos los operadores nucleares quieren continuar, nadie ha dicho lo contrario abiertamente". **
La posición de Endesa es muy clara, **"**estamos a favor del protocolo nuclear, vamos a respetar lo que se ha firmado, pero podría ser que otros no quieran respetarlo". Sin embargo, Bogas sigue teniendo la esperanza de que "lleguemos a un acuerdo".
"Lo que hemos ofrecido (a Iberdrola y Naturgy) es respetar el protocolo nuclear en todos sus términos con todas sus comas" ha dicho, "ayer me preguntaron sobre una posible cesión de las centrales, pero el protocolo no lo contempla". Más aún "contempla unas determinadas fechas y unas determinadas autorizaciones de explotación. Es lo que hay. Eso sí, si para cumplirlo es necesario otro tipo de actuación lo veremos y lo analizaremos".
Entre esos otros tipos de actuación, el consejero delegado de Endesa no se cierra a ninguna opción, "todas las posibilidades están abiertas, ceder, comprar o lo que sea... pero creo que ésa no es la solución, porque todas las empresas somos responsables y conscientes de la importancia que tiene el protocolo, y por tanto tendremos que llegar a un acuerdo entre las tres. En el último caso podríamos hacer eso, pero no es el deseo de ninguna". Por el momento, hay algunas opciones "colaterales al protocolo, y que en un determinado momento habrá que resolver en pocos días porque el plazo que tenemos es el 31 de marzo".
Aún así, "lo primero que hay que ver es si alguien dice abiertamente que no quiere seguir".
Una afirmación que aún nadie ha hecho a día de hoy. Según Bogas, "todos los operadores nucleares queremos continuar, y todas las empresas manifiestan su deseo de cumplir con el protocolo, por lo que llegaremos a un acuerdo razonable".
Ante la pregunta de este diario sobre la posibilidad de que sea el Gobierno quien intermedie en este conflicto, Bogás se ha limitado a decir que "el protocolo está firmado de acuerdo con Enresa, y como es un acuerdo que alcanzamos todos en base al PNIEC, el Gobierno está seguro que se va a cumplir con esas fechas ya establecidas".
Ante la duda sobre los intereses de Iberdrola y Naturgy en el negocio nuclear, el quid de la cuestión está en las inversiones futuras, por eso Bogas reconoce que "si en algún momento existiera unas inversiones no previstas muy superiores a las que creemos que son las que deberían hacerse, estamos dispuestos a sentarnos, a hablarlo, a hablarlo con el gobierno, pero es ponernos la venda antes de la herida".
Por eso, reconoce que la rentabilidad de quedarse con las centrales "dependería de las inversiones que se tuvieran que hacer. Las empresas valoramos qué inversiones son necesarias para cumplir lo que el Consejo de Seguridad Nuclear (CSN) nos pueda exigir en la revisión periódica que realiza, y con las valoraciones que se han hecho hasta la fecha pensamos que sí", ha confirmado.
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