La compañía alemana de suministro energético RWE estudia reducir la producción de lignito en la mina de Hambach, después de que un tribunal ordenara parar la deforestación de cien hectáreas en un bosque milenario donde quería ampliar la mina a cielo abierto.
Un portavoz de RWE dijo al semanario alemán "Der Spiegel" que en una primera valoración han dejado "un volumen de extracción mínimo de entre 10 y 15 millones de toneladas de lignito anuales"
Hasta ahora RWE extraía anualmente en Hambach 40 millones de toneladas de carbón, por lo que calcula que va a reducir la extracción entre un 25 y 38 %.
Como consecuencia de la generación de electricidad en las centrales de Neurath y Niederaußem, que utilizan el lignito para la producción de electricidad, podría caer entre 9 y 13 teravatio/hora.
La justicia alemana ordenó el pasado viernes la paralización de una tala en un bosque milenario del oeste del país donde el consorcio eléctrico RWE quería ampliar una mina de lignito a cielo abierto.
Desde 2012 grupos ecologistas se han protestado y se han manifestado en contra de la tala y han construido casetas en los árboles del bosque en las que se alojaban.
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