Cualquier excusa es buena para que los sindicatos saquen a colación el mantenimiento de las minas de carbón en España. Pese a que saben, desde hace años, que la Unión Europea ha marcado el 31 de diciembre de 2018 como fecha límite para el cierre de las minas deficitarias, aún siguen buscando subterfugios para continuar con las explotaciones.
Y la nueva excusa es el cierre de la fábrica de nacelles de la eólica danesa Vestas en Villadangos del Páramo en León. Según han publicado medios regionales, el secretario general de Industria de CCOO, Agustín Martín, ha manifestado que "eso que nos dicen de la transición energética, de transición tiene poco y de justa, menos, porque se está haciendo de forma acelerada y sin planificación, dejando a gente en la calle sin alternativas” y puso como ejemplo el anuncio de la próxima pérdida de los 65 empleos de la explotación de interior de la Hullera Vasco Leonesa en cuando concluyan las labores de desmantelamiento, lo mismo que está pasando con la fábrica de Vestas.
Pero hay grandes diferencias. La minera es una empresa que lleva desde el 11 de marzo de 2016 en un proceso de concurso de acreedores y de liquidación y que, casi tres años después, ha llegado a su fase final. Precisamente esta semana la administración concursal de la compañía minera anunciaba el inicio del Expediente de Regulación de Empleo (ERE) de extinción para la práctica totalidad de los 68 empleados que aún desempeñaban su trabajo en la empresa.
Las causas que alegan los administradores concursales para presentar el ERE son económicas por el desmantelamiento de la mina de interior y que actualmente no tienen ningún contrato de compra de carbón para el próximo año por parte de las eléctricas, aunque arrastra desde hace años problemas de insolvencia y falta de liquidez que ya hacía prever su quiebra definitiva.
"Se ha intentado que apareciese un comprador pero debe asumir la deuda y nadie quiere" explican fuentes conocedoras, "aún así CCOO pretende que el gobierno perdone a la empresa minera lo que debe de impuestos, algo legalmente imposible y que de hacerse, podría sentar un mal precedente para otras empresas en la misma situación de solvencia".
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