Lo que está sucediendo en el mercado de derechos de emisiones de la UE solo tiene un nombre y ese nombre es especulación. La fuerte recuperación del precio del CO2 en el mercado EU ETS se ha producido bajo la especulación de los inversores que querían recuperar como fuese el efecto Covid sobre el mercado.
La caída de la demanda hizo que los precios de los combustibles fósiles se desplomara hasta niveles nunca vistos. Petróleo en negativo en EEUU, el Brent en niveles no vistos en años, el gas más barato de la historia, y eso hizo que el precio del carbono también se desplomara hasta los 14.35 euros por tonelada.
Hoy este precio se sitúa por encima de los 29 euros acercándose peligrosamente a los máximos registrados del pasado julio de 30,3 euros por tonelada.
Según Vertis, firma especializada en el mercado de derechos de emisión, "el aumento de los temores de aumentar el objetivo de reducción de emisiones para el año 2030 y la actividad especulativa en el mercado contribuyeron al aumento de los precios".
Una subida tan rápida del precio del carbono hace pensar que los inversores solo quieran recuperar el terreno perdido por la inesperada crisis y así tratar de reducir su impacto lo menos posible.
Bernadett Papp, Analista Senior de Mercados de Vertis, prevé en su informe mensual de junio que "si la recuperación continúa, el precio tiene que enfrentar niveles de resistencia en los máximos del año pasado de 27,56 euros (septiembre) y 30,34 euros (julio). En el caso de una corrección, una consolidación entre 23.00 y 26.00 euros parece realista, como lo vimos en otoño e invierno".
El precio del CO2 afecta directamente al precio de la electricidad en los mercados europeos. Encarece las ofertas procedentes de las centrales que usan combustibles fósiles como el carbón y el gas.
Gracias a esta subida, a que hay mayor demanda, mayor hueco térmico, el precio de la electricidad se ha ido encareciendo poco a poco con la recuperación económica. Tal es así que el pool está a punto de alcanzar los 40 €/MWh, un precio que está lejos de lo que sucede en otros mercados europeos donde la electricidad está siendo más barata, y eso que en España ahora casi no hay carbón, está ya todo el parque nuclear funcionando y cada vez hay mayor energía solar.
Pero de momento, el CO2 marca el ritmo en los mercados.
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