Llevan los españoles viviendo varias semanas seguidas con continuos encarecimientos en el precio de la luz, y parece que no importa mucho. O así al menos ha quedado plasmado en la última entrevista al presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, en El Objetivo de La Sexta. Eran muchos temas los que había en la agenda, la tesis del presidente, la exhumación de Franco, las armas a Arabia, el empleo, Cataluña, los impuestos, pero la factura de la luz ha sido la gran olvidada.
Ni una sola pregunta de Ana Pastor al presidente sobre este tema que afecta a todos los españoles, sobre todo a los consumidores más vulnerables. Solo la periodista podría explicar por qué.
En un momento en el que la factura de la luz se ha encarecido, y que en los próximos meses va a seguir haciéndolo, hubiera estado muy bien conocer qué piensa hacer el Gobierno para hacer bajar el precio de la electricidad.
Este miércoles es el gran día escogido por la ministra Teresa Ribera para anunciar estas medidas, incluidas algunas encaminadas a reformar el mercado eléctrico.
¿Subida del diésel?
La única referencia en materia energética ha sido la subida del diésel. Ahí Pastor le ha recordado al presidente que han rectificado en varias ocasiones, algo que es totalmente verdad por mucho que Sánchez intentara escurrir el bulto. La respuesta de Sánchez fue esta.
"En nuestro país mueren más de 30.000 personas al año por contaminación atmosférica. 30.000, al año. Dos, es evidente que este Gobierno es un gobierno comprometido con la transición ecológica. Hay un desafío que se llama cambio climático (...) que nos tiene que hacer repensar muchas cosas, por ejemplo, la movilidad. Nosotros a un combustible tan contaminante como el diésel lo queremos subir una cuantía razonable. No van a estar afectados los colectivos profesionales, ni los transportistas, ni los camioneros, aquellos que realmente tienen que utilizar este combustible para su trabajo no van a verse afectados por ello", ha dicho Sánchez.
Estas palabras, que no cuentan mucho más allá de lo que ya se conocía, choca frontalmente con otra de las grandes afirmaciones del presidente que no es otra que la subida de impuestos no afectará a las clases medias. Entonces, ¿la subida del diésel a quién va a afectar si no lo va a hacer a los colectivos profesionales?
Esta medida repercutirá directamente en la mayoría de españoles que conducen vehículos diésel. Hace años premiaron a este combustible y lo incentivaron para su compra y ahora que todo el mundo, o buena parte de la sociedad, tiene uno, se le castiga. Y afectará a las clases más humildes ya que los vehículos diésel son los más baratos del mercado y a los que pueden aspirar las familias con menos recursos económicos.
De momento, no se sabe mucho más. Ni la cuantía, ni cómo lo van a hacer ni nada. Seguiremos a la espera de conocer esta medida de gran calado que afectará de lleno a una amplia mayoría de españoles.
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