La gripe nuclear y la ola de frío que azota a Bélgica y a Francia se han convertido en la tormenta perfecta para que los mercados eléctricos de estos países se hayan convertido en una especie de locura. ¡Hoy se verán los 500 euros MWh en Bélgica a las 19.00 horas!
El parón nuclear en Bélgica le tiene al país en vilo. Hasta los propios belgas tienen miedo a que se les corte el suministro y prefieren no encender mucho las calefacciones, casi todas ellas eléctricas, a sabiendas de que su factura de la luz este invierno va a ser extraordinariamente más cara.
Este miércoles el precio medio de la electricidad en el mercado belga supera los 184 €/MWh. Solo tiene dos reactores nucleares funcionando (2 GW) y prácticamente su mix está en manos de los ciclos combinados. Su segunda mayor fuente de energía son los Países Bajos. Y a pesar de ello, Bélgica se permite el lujo de exportar a Francia.
A las 19.00 horas, en el mayor punto de demanda, el precio se desorbita y alcanzará casi los 500 euros MWh. Asusta la gráfica.
Pero a esa hora, los altos precios también se verán en Francia (259,95 €/MWh), Inglaterra (119 €/MWh), Países Bajos (115 €/MWh), Austria (110 €/MWh) o Suiza e Italia cercanos a los 100 euros MWh. Solo se salvan de la gripe nuclear Alemania (67 €/MWh) y España y Portugal 70 €/MWh a esa hora.
Como se puede ver en la gráfica, los principales afectados son Bélgica y Francia. El principal problema se sitúa en Bélgica donde tiene que importar uno de cada cuatro MWh que consume y lo hace casi todo de Países Bajos, aunque realmente esa electricidad procede de Alemania y se beneficia de sus precios bajos. A pesar de ello, no consigue que el precio medio sea normal y se dispare hasta los 184 euros MWh.
En el caso francés, la nuclear está disponible al 63% aproximadamente. Pero a pesar de ello, 7 de cada 10 MWh son nucleares. Eso sí, exporta un poco de cada, siendo España el país que más energía está dando al país galo. Para hoy se esperan 51 GWh.
Parece que la ola de frío remite en los próximos días, pero estos capítulos se pueden repetir durante el invierno con frecuencia podrían tensar más si cabe los precios en el Viejo Continente.
España, de momento se salva, porque ha hecho bien su trabajo. Por un lado, los ciclos combinados ya no pagan impuestos, ni el de generación ni el céntimo verde y por otro España almacena cada vez más gas para el invierno cuando se producen episodios de alta demanda por el frío.
Turbomotor2000
25/11/2018