No hace ni un año que escribí este artículo titulado como el de hoy: "La improvisación tiene las patas muy cortas en política energética". Fue en septiembre del año pasado, cuando el presidente Pedro Sánchez y la ministra de Industria, Reyes Maroto, se hicieron el lío con el impuesto al diésel. Cada uno decía una cosa y luego pues resultó que era más un "globo sonda" que otra cosa. Lo reconoció la ministra.
Un año después, todo sigue prácticamente igual. Se sigue improvisando y lanzando globos sonda como si no hubiera un mañana.
Este martes el presidente del Gobierno en funciones, Pedro Sánchez, ha presentado una especie de propuesta de programa para tratar de convencer a Unidas Podemos y así formar gobierno a finales de septiembre, algo que parece no ocurrirá teniendo en cuenta la respuesta que han tenido de los distintos portavoces de la formación que dirige Pablo Iglesias.
El caso es que el apartado de Emergencia Climática y Transición Ecológica no se situaba hasta la medida 246. ¿Acaso ya no es una prioridad del Gobierno? Dejando esto aparte, el Gobierno anuncia a bombo y platillo que vuelve a las andadas para prohibir la venta de coches de diésel y gasolina a partir de 2040. Y claro, se ha vuelto a formar el lío.
https://elperiodicodelaenergia.com/sanchez-vuelve-a-la-carga-con-la-prohibicion-de-los-coches-de-combustible-fosil-en-2040/
¿Se acuerdan ustedes de lo que sucedió en el Congreso de las petroleras? Ribera seguía erre que erre con lo de prohibir los coches de combustión y luego los CEO cogieron a la ministra Maroto para pedir explicaciones. El caso, es que la palabra prohibir no gustaba al sector de automoción, al petrolero ni tampoco a la Comisión Europea. El propio comisario Arias Cañete advirtió que no es la mejor forma de hacer las cosas.
Pues bien, si a las 13.00 horas se conocía de nuevo la prohibición a 2040, a las ocho de la tarde se supo que ya no es así y que lo de prohibir mejor para otro momento. Ha suprimido la palabra prohibir en el artículo y alude a la toma de las medidas necesarias para que, «no más tarde» de esa fecha, los turismos y vehículos comerciales tengan unas emisiones de cero gramos de dióxido de carbono (CO2) por kilómetro.
Más o menos dice lo mismo. Pero a los fabricantes de coches les es válido y aplauden la rectificación. ¿Por qué se hace esta rectificación? La señal por parte del PSOE no puede ser más pésima. Vuelve a improvisar, a lanzar globos sonda en materia de política energética que no van a ningún lado.
https://elperiodicodelaenergia.com/el-psoe-se-echa-para-atras-solo-unas-horas-despues-y-ya-no-prohibira-la-venta-de-coches-de-combustion-para-2040/
Prohibir algo que se producirá en 2040, dentro de 21 años, situaba de nuevo a la mayor industria española, a la del automóvil, en una penosa situación. Si ya está mal de por sí, con muchos problemas de ventas, un mensaje de este calado hubiera empeorado más la cosa. Pero al PSOE le parece que le da igual. Vuelve a rectificar.
Pero, ¿acaso esto no es una propuesta? ¿No podía haberlo hecho más tarde en caso de que fructificara el acuerdo con Podemos? El caso es que la imagen del PSOE vuelve a quedar por los suelos y estas justificaciones, rectificaciones y globos sonda son lo que menos necesita la política energética española.
Es curioso el timing de lo sucedido. Primero, prohíbo. Luego, Podemos lo rechaza y después lo cambio. ¿Acaso el PSOE está ya en modo electoral?
Pero esto no es todo. Además, el PSOE vuelve a lanzar mensajes, dentro de su propuesta de programa, que son un poco irreales, por no decir bastante. Quiere una España 100% renovables en electricidad para 2050 (dentro de 31 años), y entre el 85% y el 95% en 2040, en base a un calendario de cierre de centrales de carbón y nucleares, sin aumento de los precios de la electricidad.
https://elperiodicodelaenergia.com/el-gran-ordago-del-psoe-en-energia-reformara-el-mercado-electrico-para-alcanzar-el-100-renovable-en-2050-sin-aumentar-el-precio-de-la-luz/
Para obtener eso es necesario muchísimo almacenamiento que a día de hoy no está ni se le espera por el alto coste que tiene. Y para ello, también habría que afirmar que tiene que cerrar los ciclos combinados, que usan gas natural, para ello, por lo que España se quedaría sin respaldo para la generación en horas de noche o cuando sopla poco viento.
Y ya lo de vaticinar que no aumentará el precio de la electricidad, suena más bien a brindis al sol que otra cosa. Vuelve a prometer una reforma de mercado eléctrico como si fuera algo simple de hacer. Una reforma, que en cualquier caso no solo se produciría en España sino que tendría que hacerse en toda Europa, y procedería de lo acordado en la UE. Europa camina hacia un mercado único y España debe acompañar y no ir por su cuenta en este asunto.
En definitiva, el PSOE está en claro modo electoral. Con más promesas que otra cosa. Con planes para todos, industria, coche eléctrico, viviendas eficientes, que tienen un alto coste y que no explica de dónde sacará el dinero, pero ustedes ya se lo pueden imaginar. No es momento de vaguedades ni excentricidades que no llevan a ningún lado.
Lo único que se sabe es que España está sin Gobierno desde marzo y se va a perder un año más en la dura transición energética por cuestiones de poder. Qué pena volver a un año atrás.
José Juan
04/09/2019