Cinco meses después de que un apagón dejara a España y Portugal a oscuras el 28 de abril, el incidente sigue sin resolverse. La Red Europea de Operadores de Sistemas de Transmisión de Electricidad (ENTSO-E) tiene previsto publicar esta semana sus conclusiones sobre las causas del apagón. Las primeras evidencias apuntan a una falta de capacidad de respuesta de la red.
La restauración de la frecuencia en la red eléctrica tardó más de seis horas en algunas zonas, según una investigación preliminar de ENTSO-E publicada en agosto. Esto supera ampliamente el tiempo de respuesta esperado de 30 minutos como máximo dentro del proceso de reserva de frecuencia.
IEEFA ya había identificado posibles causas del apagón, señalando el uso inadecuado y la mala dimensión de los servicios de reserva de frecuencia por parte del operador del sistema de transmisión (TSO) español. Sea cual sea la causa exacta, está claro que la falta de capacidad de respuesta de la red fue un factor clave en la prolongación del corte de suministro.
Este suceso pone de relieve la necesidad de que los operadores europeos refuercen las redes eléctricas e integren más proyectos de energías renovables y almacenamiento energético. Con las inversiones adecuadas, las redes podrían ser la base de la resiliencia, seguridad y asequibilidad energética.
No es la primera advertencia
El apagón dejó en evidencia que la falta de inversión en la red puede poner en peligro el equilibrio entre oferta y demanda eléctrica. También expuso el riesgo de una red poco resiliente en un sistema con alto crecimiento de las energías renovables.
Un informe conjunto de mayo de 2025, elaborado por Beyond Fossil Fuels, Ember, E3G e IEEFA, señaló esta debilidad. Según la investigación, los altos niveles de vertido de energías renovables en 2024 demuestran la necesidad de más inversión en tecnologías de “flexibilidad limpia” –como la flexibilidad del lado de la demanda y el almacenamiento de energía– y en el equilibrio de la red. Mientras tanto, las colas de proyectos solares, eólicos y de almacenamiento que esperan conexión a la red han crecido por toda Europa. El informe encontró que la cantidad de renovables atascadas en esas colas supera por más de tres veces la capacidad necesaria para que la UE alcance sus objetivos energéticos y climáticos de 2030.
Procesos obsoletos de conexión a la red empeoran estas colas. Esto subraya la necesidad de reforzar e “inteligentizar” la red, además de ofrecer más apoyo a los servicios auxiliares -como las reservas de control de frecuencia-, cuya carencia ha sido señalada desde hace tiempo como un obstáculo para la transición energética. Con las inversiones correctas, los beneficios serían significativos: se liberarían las colas, se entregaría energía limpia en lugar de desperdiciarla y se fortalecería la resiliencia del sistema eléctrico.
Razones financieras para invertir en la red
Por fin empiezan a verse señales de avance. En junio, la Comisión Europea emitió una esperada guía sobre inversiones anticipadas en redes eléctricas. Esto permite a los reguladores aprobar proyectos antes de que haya una demanda visible. La Comisión estima que solo la red de transmisión de la UE requerirá una inversión de 477.000 millones de euros para 2040, lo que subraya la necesidad de que los TSO busquen múltiples canales de financiación.
El caso para atraer inversiones externas es sólido, con rendimientos visibles respaldados generalmente por marcos regulatorios ya establecidos. La mayoría de los TSO europeos tienen calificaciones crediticias de grado de inversión, lo que indica fácil acceso a financiamiento, bajos costos de capital y un colchón financiero para ampliar sus programas de inversión. En julio, Terna (Italia) marcó un precedente importante al convertirse en el primer operador de red eléctrica en emitir bonos bajo el Estándar Europeo de Bonos Verdes, mostrando una práctica ejemplar de aprovechamiento de la financiación sostenible para el desarrollo de redes. La transacción, por 750 millones de euros, tuvo una demanda casi cinco veces superior, lo que permitió reducir los diferenciales de interés.
¿Y ahora, qué?
El gobierno español ha iniciado una investigación sobre el apagón para ofrecer una versión imparcial de lo sucedido. Aunque ENTSO-E publicará sus conclusiones el 3 de octubre, conviene recordar que esos resultados podrían reflejar el punto de vista del operador del sistema.
Tal como advirtió el informe conjunto de mayo, está claro que la falta de planificación de inversiones por parte de los TSO no solo limita el crecimiento de las renovables, sino que también debilita la resiliencia de la red cuando la oferta y la demanda eléctrica no están equilibradas.
Europa ya cuenta con las herramientas necesarias para solucionar esto, respaldada por la arquitectura de financiación sostenible más completa del mundo. La Comisión Europea está preparando el Paquete Europeo de Redes (European Grids Package). Este debe incluir mandatos legales alineados con los objetivos climáticos, una gobernanza más sólida, mayor supervisión y soluciones innovadoras para la integración de renovables y almacenamiento, tal como sugería el informe de mayo.
Si Europa actúa en estos frentes, las redes dejarán de ser el eslabón débil y se convertirán en la base de la neutralidad climática del continente. Esto también puede desbloquear beneficios socioeconómicos a largo plazo a través de la electrificación, infraestructuras preparadas para el futuro y una menor exposición a la volatilidad de los precios de las materias primas.
naughty
30/09/2025