La Junta de Castilla y León ha reclamado la elaboración de un plan estatal de biogás para regular ese tipo de instalaciones energéticas y ha subrayado, ante la controversia que generan algunos de las nuevas plantas, que la normativa actual es "muy exigente".
El consejero de Medio Ambiente, Vivienda y Ordenación del Territorio del Gobierno autonómico, Juan Carlos Suárez-Quiñones, ha recordado que estas plantas permiten "una mejor gestión ambiental de los restos biológicos" que se tratan en ellas y que las autorizaciones de esas instalaciones se realizan de acuerdo a criterios técnicos y no políticos.
"Son decisiones técnicas muy estrictas y, en consecuencia, cualquier proyecto de este tipo o de cualquier otra naturaleza que ve la luz es porque cumple con todos los marchamos de legalidad", ha declarado el consejero, preguntado por el rechazo que generan ese tipo de plantas de producción energética a partir de residuos, entre otros motivos, por los olores que pueden generar.
Las instalaciones de biogás
Al respecto, ha afirmado que la normativa, tanto europea, como nacional y autonómica, es muy exigente con el objetivo de "evitar daños, olores, emisiones y afectaciones a la ciudadanía".









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