Seguro que te has preguntado muchas veces cómo ha llegado la gasolina o el gasóleo a la estación de servicio en la que llenas el depósito de tu coche o de tu moto. Y la respuesta no es solo que lo hayan hecho en un camión cisterna, ya verás que no es tan sencillo cuando lo leas.
Pero tranquilo, si nunca te lo habías preguntado, ya lo le hecho yo por ti. Y en este ensayo vamos a explicar toda la red logística necesaria para que los productos derivados del petróleo, especialmente gasolina y gasoil destinados a la movilidad en tu vehículo de motor, lleguen desde la refinería hasta la estación de servicio.
El origen en la refinería. En este otro artículo ya explicamos cómo se transformaba el petróleo crudo en productos derivados que sirven como fuente de energía a la mayor parte de medios de transporte de mercancías y pasajeros de nuestro mundo: camiones, autobuses, barcos, aviones, coches o motocicletas.
Esa transformación se produce en las refinerías, y en España contamos actualmente con ocho refinerías repartidas por todo el territorio peninsular: en La Coruña, Bilbao, Tarragona, Castellón, Cartagena, Algeciras, Huelva y Puertollano.
Refinerías
Así que por lo general los combustibles de automoción y transporte que consumimos en nuestro día a día provendrán del proceso llevado a cabo en estas plantas de refinería.
Hasta las refinerías llega crudo proveniente de difesrentes lugares del mundo en los cuales existen yacimientos y pozos petrolíferos. Generalmente llega a través de barco, a los puertos marítimos anexos a estas plantas industriales, si bien en el caso de Puertollano llega a través de oleoducto.
Y en ellas se produce el proceso de refinado, que básicamente consiste en un proceso de destilación del crudo, calentándolo a temperaturas muy elevadas para que sus diferentes componentes pasen de estado líquido o semilíquido a estado gaseoso. Después esos componentes que al principio estaban todos unidos se van separando en diferentes bandejas según su distinto punto de ebullición. El resultado son los productos derivados, como el gasóleo, la gasolina o el queroseno.
Transporte por oleoducto
Ahora que ya sabemos dónde se originan los carburantes sobre los que nos ocupamos en este ensayo, toca entender cómo llegan desde la refinería hasta sus puntos de destino.
España cuenta con una red de oleoductos de más de 4.700 kilómetros de longitud a lo largo de la península ibérica, además de unos kilómetros más en la isla de Mallorca, entre Son Banya y Porto Pi.
A través de esta infraestructura se transportan los productos elaborados en las refinerías, como ya vimos en el punto anterior, por todo el territorio nacional.
Cabe decir que la mayor parte de esta red logística de productos combustibles es propiedad de la compañía CLH (Compañía Logística de Hidrocarburos) hoy grupo Exolum, que nació en el año 1997 como escisión de Campsa para favorecer el libre mercado de productos combustibles derivados del petróleo. Es decir, estos activos antes eran parte de la compañía Campsa, pero para favorecer un libre mercado (y que otros competidores, por ejemplo Cepsa, o BP, o Galp, etc.… pudiesen competir en igualdad de condiciones) el Gobierno decidió separar al gestor logístico de uno de esos competidores y constituirlo como una compañía independiente.
Estos oleoductos tienen su origen como ya hemos dicho en las refinerías, y llevan los productos a través de todo el territorio nacional, llegando hasta grandes almacenes repartidos por la geografía patria en los que se depositan a disposición ya de los vendedores minoristas.
En los oleoductos españoles se mueven anualmente entre 20 y 25 millones de toneladas de producto a lo largo del año.
Debe indicarse finalmente que también existe un oleoducto que no transporta productos derivados, sino crudos, entre el puerto de Cartagena y la refinería de Puertollano. Tras el procesado en Puertollano sus productos resultantes se insertan en un ramal del oleoducto de productos derivados.
Instalaciones de almacenamiento
Se trata de grandes instalaciones que cuentan con depósitos especiales, a los cuales llegan los productos vía oleoducto y quedan almacenados al por mayor los productos, como gasóleos y gasolinas.
En estos depósitos pueden permanecer durante meses o bien años si fuese necesario, si bien las entradas y salidas suelen ser muy dinámicas, respondiendo principalmente a la demanda minorista, y a los precios del mercado de petróleos y derivados del petróleo.
Estos almacenes están situados como ya dijimos por toda España, se reparten en todas las comunidades autónomas radicados en decenas de provincias.
La lógica del trasiego de productos en estos silos suele responder al siguiente esquema: a) llega el producto a través del oleoducto; b) se clasifica y almacena en los depósitos correspondientes; c) los propietarios de las redes de estaciones de servicio que venden el producto al por menor van comprando partidas; d) camiones cisterna especialmente diseñados para transportar hidrocarburos recogen estas partidas que han comprado las estaciones de servicio, y lo llevan desde el almacén hasta la gasolinera o punto de venta final.
Resumen de la logística
Así que ya hemos llegado al punto final de nuestro viaje, es decir, nosotros repostamos en la estación de servicio el gasoil o gasolina de nuestro vehículo, que previamente ha depositado un camión cisterna. Ese camión venía de una instalación de almacenamiento de hidrocarburos, que previamente había recibido el producto vía oleoducto. El oleoducto partía de la refinería, que antes había recibido el petróleo crudo por vía marítima y lo había procesado para convertirlo en productos derivados.
Bonus Track: ¿Cómo es que existen diferentes tipos de gasoil o gasolina entre estaciones de servicio?
Esta es otra de esas grandes preguntas que mucha gente se hace de vez en cuanto, al repostar. Y si tú no te la has hecho no te preocupes, alguna vez tenías que darte cuenta y preguntártelo, esta es tu ocasión.
Cómo es posible que existan entre estaciones de servicio cercanas de una misma zona diferentes marcas de producto de gasóleo o de gasolina, si en principio los camiones cisterna que las abastecen vienen de la misma instalación de almacenamiento. Es decir, habrán cargado el mismo producto, por lo cual parece difícil entender cómo luego lo venden con distintas marcas propias (ejemplos más conocidos: Repsol Neotech; Cepsa Óptima; BP Active).
La respuesta la encontramos también en las instalaciones de almacenamiento, porque los propietarios de las mismas dan como servicio añadido a sus clientes (los propietarios de las instalaciones de servicio) la posibilidad de realizar un coupage al recoger la mercancía, y de esa forma añadir a los combustibles los aditivos elaborados por ellos mismos, a fin de que posteriormente ya en el punto de venta puedan ofertar a sus clientes finales un producto exclusivo, diferenciándose así de su competencia.
Esta estrategia de diferenciación ha sido muy utilizada en las últimas décadas por las compañías de hidrocarburos en su venta final, algo ciertamente comprensible en un mercado tan competitivo y con un producto tan plano como el gasoil o la gasolina.
Miguel ast.
07/12/2023