La compañía petrolera finlandesa Neste obtuvo un beneficio de 347 millones de euros en el primer trimestre del año, un 72 % más que en el mismo periodo de 2017, empujada por la alta rentabilidad de su negocio de combustibles renovables, informó hoy la empresa.
El beneficio bruto de explotación (ebitda) de Neste creció un 43,4 %, hasta los 518 millones de euros, mientras su ganancia operativa alcanzó los 421 millones de euros, un 55 % más en términos interanuales.
Entre enero y marzo, la petrolera finlandesa facturó 3.629 millones de euros, un 18 % más que en el primer trimestre del año anterior, gracias principalmente al aumento del precio de los derivados del petróleo y de los volúmenes de ventas.
Su negocio de combustibles fósiles, el que más ingresos genera, facturó 2.453 millones de euros, un 22 % más, aunque su ebitda disminuyó un 18 %, hasta 192 millones, debido a la caída del margen de refinado, que bajó un 7,6 % hasta los 10,16 dólares por barril.
El volumen de ventas de gasolina y diésel creció un 18 % en términos interanuales, hasta los 3,85 millones de toneladas, gracias al aumento de la demanda de combustibles fósiles y en especial de diésel.
Su negocio de carburantes renovables mejoró notablemente su rentabilidad y aumentó su ebitda un 160 %, hasta los 307 millones de euros, pese a que su facturación creció apenas el 8,5 %, situándose en 759 millones.
Neste vendió entre enero y marzo 550.000 toneladas de biocombustibles, principalmente biodiésel producido en sus plantas de Porvoo (Finlandia), Rotterdam (Holanda) y Singapur, lo que supone un incremento interanual del 1,3 %.
La mayor parte de este tipo de combustibles renovables, el 76 %, fue a parar al mercado europeo y el resto se comercializó en Norteamérica, región que cada vez importa una mayor cantidad de biocarburantes de la compañía finlandesa.
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