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La Cumbre del Pacífico

La Cumbre empezó el lunes 6 de Noviembre, siendo la primera semana más técnica y hoy comienzan las sesiones de alto nivel político, donde escucharemos las intervenciones de las personas que representan a cada uno de los países.

Hasta ahora las negociaciones han avanzado normalmente. Durante esta COP los países tienen que seguir desarrollando los reglamentos para la aplicación del Acuerdo de París y deben prepararse para el año que viene cuando en la COP24 les toque hacer un balance de los compromisos de reducción de las emisiones, lo que ya se conoce como el “Diálogo de Facilitación Talaona”

Tras el comienzo de la segunda semana de las negociaciones climáticas en Bonn (COP 23), el tema de la acción climática pre-2020 se ha convertido en el aspecto más polémico de la COP 23. Los países menos industrializados exigen con razón compromisos de reducción de emisiones desde ya, y es que la acción climática previa a 2020 es fundamental si queremos limitar el calentamiento global a 1,5 grados como nos comprometimos en el Acuerdo de París. Las emisiones deben llegar a su máximo en 2020 a más tardar y se deben promover las prioridades de los países vulnerables, incluyendo la financiación climática, la adaptación y cómo avanzar en el tema de pérdidas y daños, especialmente teniendo en cuenta los eventos meteorológicos extremos que se han dado en el mundo recientemente.

¡Tenemos plan de acción de género!

Si hay algo que sin duda ya podemos destacar de esta Cumbre, es que el pasado sábado,en la COP23, las delegaciones del CMNUCC adoptaron el Plan de Acción de género que será aprobado esta semana en el plenario por la COP. Este plan, que responde también a anteriores compromisos durante las negociaciones, quiere reforzar la perspectiva de género en las políticas climáticas para todas las actividades relativas a la adaptación, la mitigación, así como en la adopción de decisiones. Es una buenísima noticia pues para frenar el cambio climático necesitamos una transición energética y unas políticas justas y transformadoras que tenga en cuenta a toda la población. La lucha frente al cambio climático, el abandono de los combustibles fósiles y la transición hacia un modelo energético basado al 100% en energías renovables es la oportunidad que tenemos para construir un futuro justo, verde y en paz y las mujeres somos agentes de cambio fundamentales.

La postura del gobierno español

Resulta completamente paradójico que la delegación del Ministerio de medio ambiente trabaje y participe en Bonn en las negociaciones climáticas internacionales mientras que desde Madrid las declaraciones del Ministro de Energía van por otros derroteros y son contrarias a la actuación climática.

Hace unos días, parecía que el Ministro de Energía, Álvaro Nadal, había decidido aplazar la la aprobación de un Real Decreto para regular el cierre de las centrales térmicas. Afirmó que tenía sentido esperar a los resultados del grupo de expertos que trabaja actualmente en los posibles escenarios energéticos y a un posible mayor consenso entre los diferentes grupos políticos...

Pero esta postura le duró poco al Señor Ministro y cambió nuevamente de opinión tras la reciente solicitud de Iberdrola de cerrar sus centrales térmicas de carbón. Sin dudarlo ni un segundo, ha lanzado el borrador sobre las condiciones de cierre de las centrales de producción eléctrica, saltándose por alto la voluntad de las empresas, el Acuerdo de París, al grupo de expertos, las negociaciones europeas del paquete de invierno y hasta la salud de las personas.

España es el único país de Europa occidental que ni se ha planteado el abandono del carbón. 2025 es la fecha en la que lo harán Austria, Reino Unido e Italia, precedidas en años anteriores de Francia y Bélgica, a los que se sumarán hasta 2030 Finlandia, Holanda, Portugal y Grecia, por citar sólo ejemplos de países europeos.

Con este preocupante panorama, pregunté a la delegación de gobierno que cubre las negociaciones aquí en Bonn, que cómo encajaban la lucha frente al cambio climático y el cuplimiento del Acuerdo de París con esta fijación que tiene el Ministro de Energía con el carbón, pero la respuesta solo fue de compromiso en la actuación y urgencia frente al cambio climático.

A pocos días de que finalice la COP23, recordamos al Gobierno que la voluntad y la lucha frente al cambio climático tiene que reflejarse en acciones y decisiones reales. Es el momento de planificar un cierre ordenado para que las térmicas de carbón que hay en España cierren antes del año 2025 con visión y determinación para que las empresas y las personas trabajadoras tengan los tiempos necesarios para la transición y su adaptación

París fue el punto de partida. Ahora es necesario actuar de forma más rápida. Cuanto antes actuemos mejor.

Tatiana Nuño es responsable de la campaña de Cambio climático de Greenpeace y escribe desde Bonn, Alemania.

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