La subasta para adjudicar 500 megavatios (MW) de energía termosolar, biomasa, fotovoltaica distribuida y otras tecnologías, que tenía como fecha indicativa de celebración mañana, se retrasará para incorporar cambios sugeridos por interesados y la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia.
La fecha de mañana para la concesión de régimen retributivo figuraba en la propuesta de resolución que se sometió a audiencia e información pública en diciembre, pero las alegaciones de los interesados y el informe de la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC) sugirieron cambios técnicos que implican modificar la normativa, según fuentes del Ministerio para la Transición Ecológica.
Las peticiones, que se están atendiendo, implican nuevos trámites actualmente en proceso.
La subasta contempla adjudicar 500 MW, repartidos en 200 MW para solar termoeléctrica, 140 MW para solar fotovoltaica distribuida, 140 MW para biomasa y 20 MW para otras tecnologías.
Asimismo, establecía una reserva de 200 MW para las centrales solares termoeléctricas con seis horas de almacenamiento, que admite su hibridación con fotovoltaica, biomasa o biogás.
En el caso de que las reservas de potencia a instalar para centrales solares termoeléctricas, biomasa y resto de tecnologías renovables no se adjudiquen en su totalidad, el excedente de potencia podrá ser asignado a otras ofertas de esas mismas tecnologías.
El secretario general de Protermosolar, Gonzalo Martín, ha dicho a Efe que esperan que la convocatoria de subasta se publique ahora en abril o mayo para que se celebre en septiembre, a fin de garantizar el tiempo suficiente, al menos tres meses, para preparar las ofertas.
En este sentido, ha recordado que, cuando el pasado 30 de diciembre se publicó el borrador de resolución de la subasta, se preveía que se celebrara el 6 de abril de 2022, es decir, se daban unos tres meses para preparar los proyectos.
Ha explicado que el borrador que se sacó en diciembre a consulta pública incluía ciertos puntos que requerían mayor desarrollo, como expuso el sector termosolar en las alegaciones que envió, pues no se entendía bien cómo se articulaba la hibridación con fotovoltaica.
Según Martín, un punto clave para preservar la industria termosolar en España es mantener la reserva de 200 MW para plantas nuevas, sin que una hipotética hibridación con fotovoltaica pueda "canibalizar" esa potencia.
También lo es que se permitan tamaños de plantas termosolares del orden de 100 MW, pues las actuales plantas españolas, de 50 MW y limitadas en su día por una norma, son pequeñas, según el secretario general de Protermosolar, que ha explicado que la práctica totalidad de proyectos internacionales duplican ese tamaño.
Martín considera que la Secretaría de Estado de Energía puede estar esperando a que se apruebe el real decreto que trasponga la directiva europea 2018/2001, de fomento del uso de energía procedente de fuentes renovables, que, entre otros aspectos, regula los criterios de sostenibilidad de la biomasa.
Gonzalo Martín ha señalado que, pese al retraso en publicar el texto definitivo de la resolución para la convocatoria de la subasta, que se vuelva a otorgar un plazo razonable, de al menos tres meses, para que los promotores preparen sus ofertas.
Protermosolar espera que se publique la convocatoria de la subasta este mes de abril o en mayo para que se pueda celebrar en septiembre, a fin de garantizar tiempo suficiente para diseñar las nuevas plantas, una vez se conozcan las condiciones definitivas de participación en la puja.
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