Las bondades de ser una isla energética: así es cómo España se libró del caos de los mercados eléctricos europeos a pesar de haberse desacoplado

Sí, el mercado eléctrico español también se vio afectado del caos que se produjo en los mercados eléctricos europeos el pasado 7 de junio. Ese día hubo un fallo técnico que hizo que, por ejemplo, el mercado belga y otros mercados dispararan sus precios por encima de los 2.000 €/MWh.

Ese fallo técnico ya tiene culpable, y no es otro que el operador del mercado EPEX. La causa del fallo técnico es una caída de los servidores, lo que EPEX llama un fallo de IT, que produjo que más de seis mercados quedaran desacoplados de la plataforma europea. Los países afectados fueron: Gran Bretaña, Bélgica, Países Bajos, Alemania, Francia y Austria.

Pero, según NEMO, el desacoplamiento también llegó a España y Portugal y se avisó a OMIE, operador del mercado eléctrico ibérico, de que se habían desacoplado todos esos mercados eléctricos en Europa.

Desde 2014, en Europa existe el denominado sistema de acoplamiento de los distintos mercados europeos. Una especie de Unión Europea hiperconectada. Todos los mercados trabajan el mismo modelo, funcionan con el mismo Algoritmo (Euphemia) y se casan a la misma hora.

Hasta ahora nunca había fallado, y en más de cinco años siempre se habían casado los precios de la electricidad con normalidad. Pero Europa está preparada para fallos de este tipo. Existe un mecanismo que se llaman subastas explícitas. Se trata de subasta locales para cubrir las necesidades energéticas reales que se han quedado fuera de los libros de oferta. Estas subastas se realizan a través de la plataforma JAO controlada por los TSO europeos.

En el caso de España y Portugal, el hecho de ser una isla energética hizo que prácticamente no se notara el fallo en el 'pool'. La electricidad colapsada a través de la interconexión con Francia (por eso se desacopló el mercado español) era escasa y es por ello que se realizaron las subastas explícitas en pocos minutos, tanto que el precio marcado para el sábado 8 estaba prácticamente a su hora. Igual sucedió en el NordPool o en Italia.

Fuentes del mercado han señalado a este diario que gracias a ser una isla energética no nos hemos visto afectados y no vimos los precios disparados en el mercado diario como sucedió en el resto de países centroeuropeos.

El hecho de no estar tan interconectados con Francia hizo que el desacoplamiento del mercado no influyera tanto y se cerrara casi en tiempo y forma en los 46 €/MWh que marcó ese día el 'pool'. Si la capacidad de interconexión hubiese sido mayor, otro gallo cantaría. "Se podría decir que nos hemos librado del virus", explican fuentes del mercado.

Investigación

El caos que se produjo en los mercados europeos hizo que Bélgica fijara precios por encima de 2.000 €/MWh, pero ese precio no fue al que finalmente se fijó la electricidad. Tras las subastas explícitas, en Bélgica se alcanzó un precio negativo de -133 €/MWh. La diferencia es asombrosa.

El fallo de los servidores de EPEX sigue bajo investigación con el objetivo de conocer qué sucedió realmente para que se cayeran las máquinas, y por otro lado para buscar la mejor solución de cara al futuro y que no se vuelva a repetir un error de estas dimensiones.

Lo que sí está claro es que el algoritmo con el que se casan los precios, también conocido como Euphemia, no falló. La empresa que lo diseñó, N-Side ha comunicado que su algoritmo cumplió ese fatídico día.

Si finalmente el fallo hubiera sido del algoritmo, el caos podría haber sido mayor y el problema haberse agrandado porque el sistema de fijación de precios de toda Europa habría que cambiarlo o al menos, mejorarlo. Con el tiempo que eso conlleva.

Aun así, no hay mal que por bien no venga. Este desacoplamiento del mercado de Gran Bretaña ha servido como prueba para cuando llegue el Brexit y de verdad el mercado británico se desacople de Europa.