Con las elecciones del próximo 28 de abril, todas las opciones están abiertas para la formación de un nuevo gobierno. Según ha podido saber este diario, las energéticas estarían más a favor de que el próximo (o próxima) ministro de Energía sea una figura independiente y no vinculada a ningún partido político.
Hay muchos nombres de reconocido prestigio y muy respetados por el sector que podrían ocupar ese puesto, pero antes de que pudiera llegarse a ese momento, tendría que nombrarse el nuevo Ejecutivo que lo permitiera y que estuviera a favor de la propuesta del sector.
Podría ser que una de las razones por las que las energéticas vean con buenos ojos un ministro independiente es porque, pese a las promesas, los partidos políticos no han sido capaces de llegar a consensos o a un Pacto de Energía, tantas veces prometido. Quizá sea la única manera de conseguirlo.
En el actual Gobierno, la ministra Teresa Ribera ha caído bien, pero las empresas argumentaron ante Moncloa que querían se secretario de Estado con un perfil más independiente y a poder ser con cierto carácter empresarial. Es por ello que finalmente el PSOE colocó como SEE a José Domínguez Abascal, hombre conocido en el sector.
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