Holaluz está en graves problemas financieros. A falta de que EY dé el ok definitivo a sus cuentas, la comercializadora eléctrica catalana ha registrado unas pérdidas de 26,6 millones de euros en 2023.

Unas cuentas que no han firmado dos de sus principales socios, los fondos Axon Capital y Geroa Pensioak. Esto ha generado que EY tenga que revisar de nuevo las cuentas y no ha podido llegar su informe a tiempo.

Por ello, BME se ha visto en la obligación de suspender la cotización de Holaluz en el BME Growth al no haber publicado las cuentas auditadas de 2023 antes del 1 de mayo de 2024.

Con todo ello, la compañía tiene un grave problema de deuda que podría llevarse a la comercializadora por delante. Holaluz tiene una deuda neta de más de 65 millones, de la que a corto plazo son 57 millones y no hay caja. Los ingresos han sido nefastos además en los primeros meses de 2024, ahora podría mejorar algo la situación pero todo depende de cómo salgan las negociaciones.

Posibles soluciones

Existen varias soluciones al caso Holaluz. Por un lado, puede seguir adelante (no se sabe si por mucho tiempo) si consigue un préstamo de 10 millones de euros del Instituto de Finanzas Catalán (ICF), que pertenece a la propia Generalitat, por lo que se podría catalogar casi como un rescate de la Generalitat, en plenas elecciones.

Según los dirigentes de Holaluz, si no consigue estos 10 millones, se vería en la obligación de presentar preconcurso de acreedores ya que no tiene pulmón financiero suficiente para sobrevivir y afrontar los distintos pagos.

Otra opción, mucho más complicada es que los bancos entren en negociación para refinanciar su deuda a más largo plazo. Aunque fuentes financieras explican a este diario que es una solución compleja por la que las entidades bancarias no estarían dispuestas a negociar.

La solución probable sea la venta de la compañía a un tercero. Fuentes del mercado explican que una comercializadora más grande (tipo Audax, Repsol, TotalEnergies, etc) podría hacerse con la compañía quedándose únicamente con los más de 300.000 clientes que posee y los 65 millones de deuda.

Fuentes del mercado señalan que directivos de Audax se han reunido durante estos días con los de Holaluz en busca de una solución para la comercializadora.

En definitiva, Holaluz tiene mala solución para los actuales dueños salvo que la rescaten de alguna manera.