Las recomendaciones de Bruselas para el plan energético de España a 2030: le pide más información sobre el cierre nuclear y que avance en la desaparición de la tarifa regulada

La Comisión Europea ha publicado los informes sobre los Planes Integrados de Energía y Clima (PNIEC) de los 28 estados miembros.

Sobre el borrador del PNIEC de España, Bruselas ha realizado las siguientes recomendaciones:

1. Da la bienvenida al nivel de ambición de un 42% de energía renovable para 2030 como contribución de España a la meta de la Unión Europea para ese año. Le pide incluir un indicativo de la trayectoria de la instalación de renovables. Además le pide que proporcione más detalles sobre las medidas para reducir las cargas administrativas y en los marcos habilitadores para las comunidades renovables de autoconsumo y energía renovable de conformidad con los Artículos 21 y 22 de la Directiva (UE) 2018/2001.
2. Explorar más a fondo cómo deberían desarrollarse más las medidas actuales para realizar su ambición hacia el logro de los ahorros de energía esperados. Tales medidas tendrán que entregar una multiplicación de ahorros de energía en comparación con los actuales.Los logros y los desafíos de una mejora tan significativa tendrían que ser debidamente tenidos en cuenta.
3. Seguir desarrollando medidas que apoyen los objetivos de seguridad energética en diversificación y reducción de la dependencia energética, incluidas medidas para garantizar la flexibilidad, así como información sobre la eliminación de la energía nuclear.
4. Definir objetivos y metas orientados hacia el futuro en relación con la integración del mercado, en medidas particulares para hacer frente a la evolución previsible de los déficits arancelarios en los sectores de la electricidad y el gas y el impacto potencial de las medidas previstas enuna estrategia y un cronograma para avanzar hacia precios totalmente basados ​​en el mercado.
5. Aclarar más los objetivos nacionales y los objetivos de financiación en investigación, innovación y la competitividad, específicamente relacionada con la Unión de la Energía, que se logrará entre ahora y 2030, para que sean fácilmente medibles y que sean aptos para el propósito de apoyar la implementación de objetivos en las otras dimensiones de la energía nacional integrada. Apuntalar tales objetivos con políticas específicas adecuadas y medidas, incluidas las que se desarrollarán en cooperación con otros Estados miembros, como el Plan Estratégico de Tecnología Energética.
6. Intensificar la buena cooperación regional existente con Francia y Portugal para abordar en particular, el mercado interior de la energía y las áreas de seguridad energética, en particular las interconexiones regionales. Considerar medidas de fortalecimiento relacionadas conla cooperación regional en las áreas de energías renovables y eficiencia energética.
7. Enumere todos los subsidios a la energía, incluidos en particular los combustibles fósiles, y las acciones emprendidas, así como los planes para la eliminación de ellos.
8. Integrar mejor los aspectos de transición justa y equitativa, en particular al proporcionar más detalles sobre el impacto social, laboral y de habilidades de los objetivos, políticas y medidas planificadas. Más específicamente, el plan debe abordar los impactos en las regiones intensivas en carbón, e integrar la estrategia nacional para la transición energética. Incluya una evaluación dedicada de los problemas de pobreza energética, junto con cualquier otro relacionado con los objetivos o políticas específicas que exige el Reglamento (UE) 2018/1999.