Las tecnologías de cero emisiones representaron más del 90% de la capacidad añadida el año pasado

BloombergNEF ha publicado una nueva edición de su Energy Transition Factbook con motivo de  la 15ª Conferencia Ministerial Anual de Energía Limpia (CEM) que se está celebrando esta semana en Brasil. Este informe emblemático identifica las principales tendencias –y ofrece soluciones críticas– en la transición hacia un mundo de cero emisiones netas, mostrando el progreso logrado en tres sectores: energía limpia, transporte electrificado e industria.

Estas son las conclusiones clave de cada una de estas categorías recogidas en el informe:

Energía limpia

En la conferencia COP28 del año pasado, los líderes mundiales fueron noticia al acordar el objetivo de triplicar las energías renovables para 2030. Ese objetivo coincide con el análisis de BNEF sobre lo que se necesita para encaminarse hacia el objetivo de cero emisiones netas. La generación de energía más limpia puede impulsar recortes de emisiones muy necesarios en esta década, ganando tiempo para sectores "difíciles de reducir" como la fabricación de acero y la aviación, para los que aún están surgiendo soluciones de descarbonización.

La buena noticia es que las adiciones de capacidad están pasando a ser renovables, y con rapidez. A nivel mundial, las tecnologías de cero emisiones representaron más del 90% de la capacidad agregada el año pasado. Los miembros de la CEM están teniendo un desempeño aún mejor: las renovables representan ahora más del 95% de sus adiciones de capacidad neta, frente al 46% de hace una década y media.

Transporte electrificado

El transporte también está cambiando drásticamente: los vehículos eléctricos representan ahora el 18,6% de las ventas de vehículos de pasajeros en todo el mundo. Los miembros de la CEM superaron ligeramente esta tendencia mundial: los vehículos eléctricos representaron el 19,4% de los automóviles vendidos en estos mercados el año pasado.

A nivel mundial, los vehículos eléctricos van camino de representar un tercio de los vehículos de pasajeros nuevos vendidos en 2027, frente a poco más de un sexto en 2023. Esto es fundamental, ya que la electrificación directa a través de baterías es la ruta más eficiente, rentable y comercialmente viable para descarbonizar el transporte por carretera.

Industria

Las iniciativas de descarbonización en la industria también se están acelerando, pero se enfrentan a un desafío más difícil que las de la energía o el transporte. Las tecnologías necesarias para descarbonizar el acero, el cemento y los productos petroquímicos todavía están en una etapa inicial y llevará tiempo ampliarlas.

Entre los sectores industriales, la descarbonización del acero está relativamente avanzada y se estima que el suministro de hierro y acero con bajas emisiones se multiplicará por ocho a nivel mundial entre ahora y 2030.

El hidrógeno también está teniendo un buen desempeño dentro de la CEM. De los 54 mercados que tenían una estrategia de hidrógeno a principios de 2024, 25 eran miembros de la CEM.

Inversión

En los últimos 15 años, los miembros de la CEM han atraído más del 90% de la inversión mundial en transición energética, o un total acumulado de 8,3 billones de dólares. Se trata de una suma enorme, pero se necesita mucho más.

Según un análisis de BNEF, se necesitan más de 215 billones de dólares para alcanzar el objetivo de cero emisiones netas en 2050. Se necesitarán inversiones no solo para implementar tecnologías, sino también para abordar las barreras e incentivar las soluciones que permitirán que se desarrolle la transición energética.