Las subastas de renovables de los años 2016 y 2017 dieron un buen empujón a la industria eólica española tras el parón de los años previos. Estos tres años se ha trabajado a toda máquina para llegar a tiempo con la entrega de los pedidos para que los desarrolladores puedan cumplir con la fecha mágica de 2020 con sus proyectos finalizados. Sin embargo, después de esta sobreabundancia, queda poco por hacer.
Tanto es así que, según ha podido saber El Periódico de la Energía, Siemens Gamesa ya ha anunciado que no va a renovar a los trabajadores eventuales. Y algo parecido ocurrirá en el resto de fabricantes eólicos con plantas en España. "Estaríamos hablando de entre un 15% y un 20% de la plantilla total del sector, porque aunque en Siemens Gamesa apenas se llega a un 10% de temporalidad, en otras compañías como Vestas puede llegar a ser de hasta el 40%", dicen fuentes sindicales.
"Con las subastas repentinas de 2016 y 2017, se produjo una capa de trabajo exponencial con tantos megavatios ofertados, pero si las máquinas ya tienen que estar montadas en 2020 y no hay nuevas subastas en el corto plazo, no hay más trabajo", explican las fuentes, "y si hubiera algún reestructuración prevista en 'Onshore' por parte de alguna compañía del sector, se sumaría a la cifra de los temporales, con lo que la sangría sería mucho mayor".
En el caso de Siemens Gamesa, que cuenta con toda la cadena de valor en el negocio, estarían hablando de unos 500 eventuales. "Por ejemplo, en la planta de nacelles en Agreda (Soria) hay unos setenta temporales, en su fábrica de turbinas de Reinosa (Cantabria) unos cuarenta, en la de palas de As Somoza otros tantos, y así hasta sumar hasta casi el 10% de la plantilla", explican.
El resto de competidores, como Vestas o General Electric, aunque cuentan con menos fábricas, la eventualidad es mucho más alta. Por ejemplo, en la fábrica de Daimiel de Vestas casi la mitad de los trabajadores (unos 400) tienen contratos temporales. "Probablemente si hubiese una subasta de renovables este año, se vería frenada esta decisión", añaden las mismas fuentes.
El parón de las Elecciones Generales ha supuesto un fuerte varapalo para la industria eólica. Aunque el Plan de Energía y Clima (PNIEC) anunciaba una calendarización anual de subastas de renovables de al menos 3.000 MW como mínimo para alcanzar los objetivos ambiciosos de cara al 2030, ahora surge la incertidumbre de si dará tiempo a convocar una en este año.
Antes de ello, primero se tendrá que formar gobierno, y los socialistas ya han anunciado que no moverán ficha hasta después de las elecciones autonómicas y municipales, lo que retrasará aún más su puesta en marcha. Sin embargo, ya os contamos que desde el IDAE aseguran que se sigue trabajando para que se pueda convocar una subasta de renovables en este mismo año, aunque no pueden asegurar si dará tiempo.
https://elperiodicodelaenergia.com/el-gobierno-quiere-lanzar-una-nueva-subasta-de-renovables-en-2019-pese-al-paron-de-las-elecciones/
Su objetivo es ajustarse al texto que el Gobierno aprobó en el PNIEC, es decir, a un modelo que pueda responder a las necesidades del proceso de descarbonización de la economía del país, y conseguir que en 2030 el 42% de la energía total sea de origen renovable.
Esto significa que la potencia eólica instalada se debe duplicar de 2015 a 2030, la solar fotovoltaica se multiplique por nueve y se amplíe la capacidad del resto de renovables. Es decir, que energía eólica debe pasar de una potencia instalada de 22.925 MW en 2015 a 50.528 MW en 2030, y la solar fotovoltaica de 4.854 MW a 36.882 MW.
El tiempo corre en su contra y solo el nuevo Gobierno tiene la llave para evitar la debacle.
Josep
14/05/2019