Los ingenieros catalanes insisten en el despliegue de las energías renovables

Los colegios de Ingenieros Agrónomos; de Caminos, Canales y Puertos; Industriales; Informáticos; y la Asociación Catalana de Ingenieros de Telecomunicaciones piden el impulso de "proyectos que aporten generación eléctrica de km0 que beneficien la actividad económica territorial" y hagan crecer la actividad económica en el conjunto del territorio. En el manifiesto "Territorio y transición energética", los ingenieros insisten en el desarrollo de las energías renovables "que son una oportunidad para favorecer un desarrollo industrial y económico, al tiempo que sostenible, del territorio".

Los cinco colegios de ingeniería defienden que "hay que trabajar por un justo equilibrio entre el interés general de transformación del modelo energético y los intereses particulares" pero piden reforzar un cambio de visión que fomente los proyectos - individuales y colectivos- de actividad energética distribuida en el territorio, y que permitan compatibilizar proyectos agrícolas, pesqueros e industriales con la generación renovable.

"Las viñas eólicas, las bodegas o las industrias neutras en carbono deben servir de ejemplo paran que la generación renovable y fotovoltaica sea entendida como una actividad necesaria en una nueva visión de progreso para nuestro país", haciéndolas compatibles con el uso de los buenos suelos agrarios para la producción de alimentos.

Para los ingenieros, el "Decreto-Ley 16/19 de medidas urgentes para la emergencia climática y el impulso a las energías renovables" -que fue aprobado en el Parlamento con una amplísima mayoría favorable- donde se considera la generación eléctrica renovable una actividad de utilidad pública, es un instrumento necesario, pero no suficiente. "Es necesaria una mayor agilización de los trámites" si no se quieren perder proyectos ya en marcha, reclaman los ingenieros.

PROCESO DE DESCARBONIZACIÓN

Tras constatar que la energía eléctrica descarbonizada y la electrificación de algunos servicios es un elemento clave para la etapa de transición energética hasta 2030, defienden que "el proceso de descarbonización debe ser compatible con la suficiencia del suministro y el mantenimiento de la competitividad de nuestra industria y de los servicios".

"El reto central recaerá en implantar los cambios necesarios de los sectores industriales y el transporte", concluyen los ingenieros, que prevén que "habrá mucha investigación y grandes inversiones industriales para alcanzar en 2050 los cambios necesarios".