Esta próxima semana se lleva a Pleno del Ayuntamiento de Madrid la nueva Ordenanza de Movilidad Sostenible, donde lo más importante es el proyecto Madrid Central, que incluye restricciones al tráfico en la almendra central de la ciudad (Distrito Centro). A partir del 23 de noviembre comenzarán a ser efectivas, en caso de aprobarse por mayoría, pero no se empezará a multar hasta febrero.
Un mes antes del comienzo de las navidades, llegar hasta el centro de Madrid va a ser misión imposible para aquellos que estén acostumbrados a moverse en coche.Tan solo podrán hacerlo los residentes y un número determinado por ellos, a los que el Ayuntamiento ha llamado 'invitados', además de personas con movilidad reducida, los servicios públicos esenciales, sanitarios y de emergencias, las motocicletas y ciclomotores, las bicicletas y los taxis o los vehículos de arrendamiento con conductor, los llamados VTC.
A todos ellos se suman los vehículos con etiquetas Cero emisiones o ECO de la DGT, entre los que se encuentran los vehículos eléctricos, los de autonomía extendida, los movidos por pila de combustible, los híbridos (enchufables o no) y los movidos por GLP y GNC.
Los vehículos con etiqueta B o C podrán acceder al centro sólo si se dirigen a un aparcamiento público.
El resto, los que no tengan pegatina, es decir todos los coches diesel matriculados antes del 2006 y todos los coches y motocicletas de gasolina matriculados antes del 2000 tendrán el acceso totalmente prohibido si no son vecinos o invitados.
Y para que el Plan sea conocido por todos los madrileños y visitantes de la ciudad, se van a poner en marcha un conjunto de medidas coordinadas de vigilancia y control del tráfico en la zona. Según ha anunciado el equipo municipal, se va a reforzar el número de efectivos de Agentes de Movilidad en los ejes Gran Vía, Mayor/Carrera de San Jerónimo y Alcalá/Sevilla/Peligros o Alcalá/Cedaceros.
"Para quien vaticina el caos, vamos a poner en marcha la coordinación de todas las áreas porque desplegar Madrid Central es lo más importante del Plan A de Calidad del Aire", ha explicado Inés Sabanés, la concejala de Medio Ambiente y Movilidad del Ayuntamiento, "queremos transformar el sistema de movilidad pero también porque es un mandado de las directivas de movilidad de la Unión Europea. Hay que conseguir que el espacio público (un bien escaso que hay que proteger) sea el adecuado".
Nadie duda de que esta Ordenanza de Movilidad Sostenible se aprobará porque el equipo de Manuela Carmena cuenta con el apoyo del PSOE, con lo que tiene la mayoría necesaria asegurada.
"Esta transformación apela a un nuevo modelo distinto no a dispersar el tráfico", ha asegurado Sabanés, "se trata de reducir la necesidad de utilizar el coche, hay alternativas de movilidad para ir al centro de Madrid pero todo cambio lleva un tiempo".
Y no solo se prohibe el paso de determinados vehículos al centro de Madrid. Las ampliaciones de aceras y la construcción de nuevas vías ciclistas han reducido notablemente la presencia del coche. El Consistorio está ampliando las aceras de cientos de puntos de la ciudad, pero la más destacadas es la de la Gran Vía, donde el vehículo privado perderá 5.400 metros cuadrados en beneficio del peatón, al quedarse si uno de los dos tradicionales carriles de subida.
Para facilitar información, y además del canal permanente www.madrid.es/incidenciastrafico se ha creado un espacio Web https://bit.ly/2MJR8zZ, en el que se explica cómo se llevan a cabo las principales obras del centro de Madrid.
"Con estas obras podemos comprobar que ha tenido un reflejo en la conducción. Hay una modificación en el comportamiento de los conductores desde que se puso en marcha", ha añadido la concejala, "ya se han producido muchos cambios en la mentalidad, pero siempre se les pregunta a los conductores cuando la mayoría de los que viven en Madrid son peatones. Su opinión es clara, al igual que se ha visto en los protocolos de contaminación. La ciudad lleva más de 11 años incumpliendo los valores mínimos de calidad del aire para la salud".
Esto solo es el principio. Madrid suele ser modelo a seguir por otras ciudades españolas, con lo que habrá que tomar nota a la guerra declarada al coche privado, en especial al diésel.
Y es que "hay transformaciones que requieren pensar más allá de los periodos electorales y, en el caso de Madrid, es comparable a la que se están haciendo en otras ciudades europeas, como Copenhague", ha concluido.
Deja tu comentario
Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Todos los campos son obligatorios