Mapfre ha disminuido su huella de carbono global un 26% con respecto al año 2019, lo que representa 22 puntos y medio por encima del reto marcado para 2022 (3,5%). Con este hito, la aseguradora ha superado todos los objetivos que se había propuesto para reducir la huella de carbono que genera con su actividad.
Estos resultados se enmarcan dentro del compromiso de la compañía por la sostenibilidad y la lucha del cambio climático, con objetivos públicos como reducir el 50% de la huella de carbono operativa del Grupo a 2030 respecto a 2019 y convertirse en una compañía neutra en todos los países para 2030.
"Estamos muy satisfechos con los resultados", ha asegurado el director de Medio Ambiente de Mapfre, Jacinto Muñoz, quien ha señalado como causa de peso su compromiso con la movilidad sostenible, gracias al cual han conseguido reducir desplazamientos diarios al centro de trabajo y viajes de negocio de forma significativa.
La descarbonización para Mapfre
Para lograr estos resultados, Mapfre ha volcado todos sus esfuerzos en avanzar hacia la descarbonización de la economía, no solo a través de la inversión y la suscripción, sino también poniendo en marcha una serie de medidas para reducir la huella de su operación directa, con "una estrategia completamente integrada en el negocio y en la toma de decisiones de todas las áreas de la compañía", ha explicado Muñoz.
En palabras del director, se trata de un plan "muy ambicioso, con objetivos, medibles, alcanzables y realistas", que "apenas contempla una inversión extraordinaria", con plazos concretos para reducir la huella de carbono y compensar la parte que no puedan eliminar, y con un plan de acción que implica "grandes compromisos".
En concreto, la compañía se ha centrado en la restricción de combustibles fósiles y electricidad, la utilización de energías renovables, como la solar, la sustitución de su flota de vehículos convencionales por híbridos o eléctricos, y la reducción de los viajes de negocio y los desplazamientos de sus empleados a los centros de trabajo.
Combustibles fósiles
En lo que respecta a la reducción de combustibles fósiles, Mapfre ha apostado por la compra de electricidad con certificados de garantías de origen 100% renovable. Así, en 2022, el Grupo adquirió el 65% de la electricidad verde gracias a esos contratos de compra con los que actualmente cuentan países como España, Alemania y Paraguay (100%), Portugal (99%), Brasil (70%) e Italia (50%).
Además, la compañía ha logrado reducir un 9% la huella de carbono vinculada principalmente al consumo de combustibles, superando ampliamente el objetivo marcado del 1,7%, gracias a iniciativas como la sustitución progresiva de la flota propia de vehículos de combustión convencional por vehículos híbridos o eléctricos, que en 2022 representaron el 15% y que aspira al 100% para 2030. Ha influido, además, el uso de calefacción sostenible que ha permito a la entidad reemplazar calderas de gasóleo y gas natural por bombas de calor eléctricas.
En este sentido, la aseguradora se ha comprometido a que el 100% del consumo eléctrico para 2030 provenga de energías limpias.
En lo que respecta a la huella de carbono indirecta asociada a la movilidad de los empleados (viajes de negocio y desplazamientos al centro de trabajo), Mapfre ha logrado reducir sus emisiones un 29% frente a 2019, excediendo ampliamente el objetivo fijado (3,5% para este año). Un dato que, en palabras de la compañía, supone un "avance importante" al representar este tipo de viajes más del 65% de sus emisiones totales.
Para alcanzar dicho objetivo, la compañía cuenta con una nueva política de viajes, recientemente aprobada, que persigue eliminar los desplazamientos innecesarios y fomentar el uso de transporte sostenible, como por ejemplo el uso del tren de alta velocidad frente al avión.
Gracias a ello, Mapfre ha logrado que la huella de carbono procedente de los viajes de negocio en 2022 se haya reducido un 68% respecto a 2019, superando de forma significativa el objetivo previsto del 2% para el año 2022. Los países que más la han reducido se encuentra Honduras (97%), Paraguay, Uruguay y Venezuela (96%), Panamá (95%), Chile (93%), Colombia (91%) y EEUU, El Salvador y Guatemala (89%).
Otra de las iniciativas que han influido en esa reducción de emisiones es la implantación gradual y permanente de trabajo híbrido (presencial y remoto) en el Grupo a lo largo de 2022. En concreto, Mapfre ha logrado disminuir un 14% la huella de carbono del 'commuting' respecto a 2019, una cifra que también supera el objetivo del 4% fijado para el año 2022.
Eficiencia energética
Por otro lado, la implantación de modelos híbridos de trabajo, la optimización de espacios de trabajo, las inversiones de eficiencia energética y renovación de flotas de automóviles a motores ECO y más eficientes han logrado reducir un 12% el consumo energético del Grupo Mapfre, vinculado al consumo de energía de los edificios y la flota de vehículos, superando el objetivo previsto para 2022 del 3%.
Los países que más han contribuido a esta reducción son Guatemala (61%), Turquía y Brasil (46%), Ecuador (41%), Chile (34%), El Salvador (29%) y Colombia (28%).
Para el director de Medio Ambiente de Mapfre, se trata de medidas "importantes", que permiten afianzar un cambio cultural en la empresa, estableciendo una política común para el control estricto de las solicitudes de gestión de un desplazamiento para tratar de eliminar los viajes innecesarios.
"Esto nos va a permitir cumplir el compromiso que hemos establecido, que es reducir un 8% de la huella de carbono de los viajes de negocio (avión, tren y autobús) para 2024 y total de al menos un 20%, para 2030", ha señalado.
En cuanto al consumo eléctrico, Mapfre logró deducir en 16 GWh la energía eléctrica adquirida total en 2022, lo que supone un 14% menos respecto a 2019. Los países que mayor esfuerzo han realizado para reducir el consumo eléctrico son Turquía (49%) y Brasil (43%), Chile (39%), Colombia (33%), Ecuador (32%), EEUU (30%) y El Salvador (30%). Actualmente, el consumo eléctrico representa más del 70% del consumo energético del Grupo.
En España, la instalación de 4.700 placas fotovoltaicas permite reducir anualmente 3 GWh en la sede central de la entidad. A la generación de energía solar en España, a lo largo de 2022 se han sumado otros países como México, República Dominicana e Italia, generando 0,2 GWh entre los tres países.
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