España ha autorizado la construcción de 143 proyectos de energías renovables durante el primer trimestre de 2025, que suman una potencia instalada de 3.291 megavatios (MW). Así lo revela el último informe del Observatorio de Energías Renovables, que detalla la evolución administrativa de los desarrollos mayores de 1 MW no destinados al autoconsumo.
La mayor parte de esta capacidad corresponde a energía solar fotovoltaica, que representa el 91,8% del total autorizado, con 3.019,5 MW. Le siguen los parques eólicos, con 221,5 MW (6,7%), y los proyectos de biomasa, con apenas 50 MW (1,5%). Este desequilibrio entre tecnologías refleja el actual predominio de la fotovoltaica en los nuevos desarrollos renovables del país.
Distribución administrativa y territorial
Las competencias para otorgar las autorizaciones están repartidas entre el Ministerio para la Transición Ecológica (MITECO) y las comunidades autónomas. En este primer trimestre, el Gobierno central fue responsable de aprobar 1.732,7 MW, mientras que las administraciones regionales autorizaron los 1.558,2 MW restantes. Esta distribución muestra una colaboración fluida entre ambos niveles de gobierno, aunque también evidencia las diferencias en la envergadura de los proyectos que gestiona cada uno.
Por comunidades, Castilla-La Mancha lidera el listado con una potencia total autorizada de 1.109,7 MW, gracias a un destacado volumen de instalaciones fotovoltaicas y varios proyectos de biomasa. Le siguen Aragón (549,9 MW) y Castilla y León (542,6 MW). También destacan la Comunidad Valenciana (381,2 MW) y Cataluña (171,3 MW).
En el extremo opuesto, Asturias, Canarias y La Rioja no registraron ninguna autorización de construcción para renovables durante el primer trimestre del año, lo que plantea dudas sobre el dinamismo del sector en estas regiones.
Baja respecto a trimestres anteriores
A pesar de las cifras, el volumen autorizado marca una disminución respecto al ritmo observado en 2024. En comparación con el último trimestre del año pasado, se han aprobado 790,9 MW menos. Y si se compara con el mismo trimestre del año anterior, la caída es aún más pronunciada: 1.684,8 MW menos. Esta tendencia descendente convierte al primer trimestre de 2025 en el más bajo de los últimos cinco en términos de potencia autorizada.
El informe señala que este descenso podría estar vinculado a diversos factores, como la saturación de puntos de conexión a la red, la ralentización en los trámites administrativos o el endurecimiento de los criterios ambientales.
Almacenamiento, un complemento necesario
En paralelo, la autorización de proyectos de almacenamiento energético sigue ganando protagonismo. En el primer trimestre se aprobaron seis plantas, con una potencia conjunta de 95,2 MW. De estos, 74,3 MW corresponden a baterías independientes, mientras que los restantes 20,8 MW forman parte de una instalación híbrida junto a una planta fotovoltaica.
Asimov
14/04/2025