Datos recientes de inspecciones realizadas por la empresa letona Aerones, en más de 1.500 palas en diferentes condiciones ambientales en Europa, Norteamérica y Sudamérica, muestran que aproximadamente el 23% de las palas tienen los SPCR rotos o dañados. Ciertamente, no se pueden evitar los impactos de rayos. No obstante, los daños que causan sí se pueden evitar, mediante un mantenimiento preventivo regular. De la misma forma que acudimos a revisiones médicas anuales para prevenir enfermedades, las palas de las turbinas se deben cuidar para evitar daños irreversibles. Esta es la labor de empresas de mantenimiento, como Aerones, comprometidos a mejorar la eficiencia de las turbinas eólicas.
Como en toda industria, los costos de reparación son un fastidio, sobre todo teniendo en cuenta que, si el daño causado por el rayo hace que una turbina eólica detenga sus operaciones, el propietario de ésta deberá asumir una pérdida de recursos y de capital. Teniendo en cuenta que el funcionamiento de una única turbina eólica de 2,4 MW genera ganancias de alrededor de los 1.000 dólares al día, es fácil hacer la ecuación.
En realidad, un impacto de rayo casi nunca implica la parada de una única turbina. Uno de los incidentes más importantes del año pasado provocó la parada de un parque entero con más de 40 turbinas. Casos así son los que han incentivado que las tarifas anuales de seguros de turbinas eólicas hayan aumentado, y se espera que continúe de la misma forma, suponiendo para los propietarios de parques un mayor porcentaje de su balance de gastos.
La inversión en el mantenimiento de turbinas hace que este riesgo “inevitable” sea más gestionable; la ejecución de inspecciones planificadas ayuda a evitar estos costosos daños. Es mucho más económico identificar y reparar daños mínimos en el SPCR que desembolsar recursos para reparar daños serios. Es por ello, que las empresas de mantenimiento recomiendan que se confíe en el uso de medidas preventivas, como las inspecciones regulares, para combatir la incontrolable fuerza de la naturaleza.
Concretamente, Aerones trabaja con una tecnología innovadora de mantenimiento de aerogeneradores con sistemas robotizados para el cuidado de palas de turbinas eólicas. Principalmente, se centran en cuatro aspectos principales: inspección, reparación, limpieza y revestimiento, inspección visual e instalación del sistema robotizado. Su tecnología permite que la protección contra rayos y las inspecciones visuales, externas e internas, sean procedimientos eficientes en cuanto a tiempo y costo (sólo 1-2 horas por turbina) reduciendo el tiempo de inactividad y evitando el error humano. Para ellos supone una oportunidad para demostrar que la innovación tecnológica es la mejor opción para disminuir los costos operativos de la energía eólica y hacer así que las energías renovables sean más competitivas.
Algunos clientes como Nordex, Enel (USA, Chile, Perú) y Siemens Gamesa, ya están implementando su tecnología, por ser más rápida, más segura, más precisa, más efectiva y porque les ayuda a reducir costes de operación. En estos momentos son los expertos más rápidos del mercado (hasta 2-3 veces más rápidos) y sus servicios de revisión de turbinas ofrecen una visión completa del estado actual, desde una única pala, a toda la turbina.
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