La idea de que los bitcoins consumen más electricidad que varios países desarrollados juntos es tan conocido como la criptomoneda misma. Y esto es así por cómo se trabaja para crear este nuevo lenguaje encriptado. Los ordenadores que se dedican a la minería procesan funciones matemáticas y a su vez, otras máquinas tienen que revisar todas las transacciones anteriores para garantizar que no hay duplicados, y ampliar aún más las funciones. Esto significa que el proceso necesita una ingente cantidad de electricidad que crece exponencialmente y sin final. Y ahí comienza el problema.
Uno de los países donde más mineros de criptomonedas hay es Estados Unidos, y especialmente el Estado de Nueva York. El crecimiento en el número de mineros ya supone un problema para el suministro de electricidad, y la Comisión de Servicio Público del Estado de Nueva York (PSC) ha tomado cartas en el asunto. Acaba de dictaminar que las compañías eléctricas del norte del estado puedan cobrar a los mineros de bitcoin las tarifas eléctricas más altas, ya que hasta ahora podrían estar tratando de aprovechar el suministro de electricidad más barato, según un artículo publicado por NewsBTC.
La situación es tan extrema que hace unas semanas la ciudad de Plattsburgh, también en el estado de Nueva York, anunció que había impuesto una prohibición temporal de 18 meses a la minería de bitcoin, convirtiéndose en la primera ciudad del mundo en hacerlo. La propuesta salió del alcalde de la ciudad, Colin Read, pero consiguió el voto unánimemente de todo el equipo municipal porque querían que la ciudad impidiera a los mineros que usaran toda la electricidad de la tarifa barata.
En un artículo publicado por el New York Times en febrero pasado, ese mismo alcalde explicaba que la minería bitcoin se había adueñado del 10% del suministro de electricidad fijo de la ciudad entre los meses de enero y febrero. Como resultado, los hogares se quejaban de que sus facturas habían aumentado hasta los 100 y 200 dólares más al mes.
Ahora, esta decisión ha llevado las cosas un paso más allá, porque el PSC está tratando de nivelar el campo de juego al garantizar que los residentes no se enfrenten a tarifas de electricidad innecesariamente altas mientras que al mismo tiempo se fomenten las operaciones mineras para construir sus compañías en Nueva York.
"Debemos asegurarnos de que los clientes comerciales paguen un precio adecuado por la electricidad que utilizan", ha señalado John B. Rhodes, presidente de la Comisión, "es especialmente importante para pequeños municipios y localidades que consumen poca energía, y deben tener disponible a bajo coste. Si no hubiéramos actuado, los clientes residenciales y comerciales existentes en las comunidades del norte, que tienen una comercializadora municipal, verían un fuerte aumento en sus facturas de electricidad".
Antes de la decisión, la Agencia Municipal de Energía de Nueva York (NYMPA), una asociación que tiene 36 gestores municipal de la energía, y que varían en tamaño de 1,5 mWh a 122 mWh, se reunió con la Comisión para plantearles sus preocupaciones sobre las operaciones mineras de bitcoin y el impacto que estaba teniendo en los precios de los suministros locales.
El PSC determinó que debido a la intensa cantidad de electricidad necesaria para impulsar los esfuerzos de las computadoras, las compañías mineras de bitcoins usaban 'miles de veces más electricidad que la que usaría un cliente residencial promedio'. También señaló que si bien usar una gran cantidad de electricidad pudiera pasar desapercibida en las grandes ciudades, en las poblaciones más pequeñas era imposible.
La nueva resolución supone que a partir de ahora las comercializadoras de propiedad municipal, que son la mayoría en el norte del Estado de Nueva York, podrán crear una nueva tarifa para clientes de carga de alta densidad que tengan una demanda máxima que exceda los 300 kWh y una densidad de carga anual mucho mayor a 2.500 kWh por metro cuadrado. Se espera que esto responda a las necesidades de todos los involucrados al mismo tiempo que proporcione un lugar para el crecimiento de estas empresas tan innovadoras y de futuro. Y así, todos contentos.
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