Más ecológica, más grande, más valiosa: así será RWE en 2030. Por primera vez, la compañía proporciona detalles de cómo se verá al final de la década. Con su nueva estrategia 'Growing Green', RWE acelera el ritmo e invertirá 50.000 millones de euros brutos en su negocio principal. Eso significa una media de 5.000 millones de euros brutos cada año en energía eólica marina y terrestre, energía solar, baterías, generación flexible e hidrógeno. De este modo, la empresa amplía su cartera en 25 gigavatios netos hasta 50 gigavatios (GW) en los atractivos mercados de Europa, América del Norte y la región de Asia y el Pacífico.
“Nuestra transformación estratégica integral se ha completado con éxito. Estamos en una excelente posición para dar forma activamente a la década clave de la transición energética. Con nuestra estrategia de inversión y crecimiento 'Growing Green' aceleramos fuertemente el ritmo e invirtiremos 50.000 millones de euros brutos hasta 2030. Esto nos ayudará a ampliar nuestra potente capacidad de generación ecológica a 50 gigavatios. Como resultado, el EBITDA ajustado en nuestro negocio principal aumentará en una media del 9% anual, con un objetivo de 5.000 millones de euros para 2030”, dijo Markus Krebber, CEO de RWE
La capacidad neta se agregará a un ritmo acelerado: anteriormente, RWE tenía como objetivo aumentar su capacidad total en una media de 1,5 GW al año. En el futuro, esta cifra promediará 2,5 GW al año, lo que supone un aumento del 70%. Esto también incluye hidrógeno verde: para finales de la década, RWE tiene como objetivo construir su propia capacidad neta de 2 GW de electrolizadores.
Como consecuencia, el EBITDA ajustado (ganancias antes de intereses, impuestos, depreciación y amortización) en el negocio principal aumentará sustancialmente, hasta los 5.000 millones de euros previstos para 2030, probablemente más del doble de la cifra del año fiscal en curso.
También a corto plazo, la situación de las ganancias de RWE se está desarrollando bien; De esta forma, la compañía eleva su pronóstico actual para el año fiscal 2022.
Músculo financiero
Con mucho, la mayor parte del programa de inversión de RWE se financiará con sus fuertes flujos de efectivo de las actividades operativas. Gracias a su excelente solvencia crediticia y bajo nivel de endeudamiento, la empresa tiene mucho margen financiero. Michael Müller, director financiero de RWE AG, comenta: “Nuestra nueva estrategia no solo presenta una imagen clara de cómo se desarrollará nuestra empresa de aquí a 2030; también muestra que somos financieramente fuertes y que financiaremos nuestro crecimiento verde con fondos verdes. Nuestro programa de crecimiento agrega valor y es sostenible".
Y añade: “También queremos que nuestros accionistas se beneficien del crecimiento de nuestras ganancias. Para el año fiscal 2021, la compañía planea aumentar el dividendo a 90 céntimos de euro por acción. Tenemos la intención de mantener nuestro dividendo en un piso de 90 céntimos de euro por acción en los próximos años.
Ya hoy, RWE es una de las empresas líderes mundiales en energías renovables. Por lo tanto, es lógico que las energías renovables sean uno de los puntos focales de la nueva estrategia: para 2030, RWE tiene la intención de triplicar su capacidad eólica marina de 2,4 GW a 8 GW. Estas actividades se centran en Europa, América del Norte y los mercados asiáticos, donde la empresa trabaja junto con socios.
Para la energía eólica y solar terrestre, RWE ampliará su capacidad de generación instalada de 7 GW a 20 GW; el énfasis aquí se divide aproximadamente al cincuenta por ciento entre los dos, tanto en Europa como en América del Norte. Esto aprovechará los potenciales particulares que ofrece la energía solar: la capacidad se incrementará de menos de 1 GW a 8 GW. El negocio del almacenamiento de baterías también se centra claramente en el crecimiento.
RWE aprovechará las oportunidades de crecimiento para un suministro eléctrico flexible en sus mercados tradicionales en particular, es decir, en Alemania, el Reino Unido y los países del Benelux, y contribuirá a la seguridad del suministro mediante la creación de capacidades de generación flexibles. Con una capacidad instalada de 14 GW, RWE opera actualmente la segunda flota de centrales eléctricas de gas más grande de Europa. Se planean plantas adicionales con una capacidad de generación de al menos 2 GW, que tendrán una hoja de ruta clara de descarbonización. Además, también se desarrollará una hoja de ruta para la "conversión verde" para todas las centrales eléctricas existentes.
RWE también ampliará significativamente su comercio de fuentes de energía verde y su gama de soluciones energéticas personalizadas para grandes clientes. Gracias a su experiencia con su propia transformación, RWE es el socio de elección cuando se trata de la descarbonización de la industria. La compañía también planea abrir nuevas oportunidades comerciales en las áreas de importación de hidrógeno y amoníaco, con el fin de abastecer a la industria en Europa.
Hacia una sociedad climáticamente neutra.
Markus Krebber enfatiza: “RWE puede ofrecer lo que el mundo de la energía verde necesita: electricidad proveniente del viento y el sol, cuya demanda está aumentando cada vez más; sistemas de almacenamiento y capacidad de generación flexible para asegurar el suministro; experiencia e impulso para impulsar la economía del hidrógeno; soluciones integradas para el cliente para suministrar energía verde a la industria; y una reducción masiva de CO 2 para contribuir al logro de los objetivos del Acuerdo de París".Y concluye: “La transformación hacia una sociedad climáticamente neutra requiere empresas que pongan todos sus esfuerzos en esta tarea. Eso es lo que está haciendo RWE y, para lograrlo, puede confiar en la energía, la pasión, la experiencia y la pericia de sus empleados ”.
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