La patronal vasca Confebask, y las de Guipuzcoa, Vizcaya y Álava, han expresado al Gobierno su oposición al decreto de medidas urgentes para mitigar la escalada del precio de la energía y han pedido que lo reconsidere por su impacto “muy negativo” en la industria vasca.
Confebask y sus asociaciones territoriales Adegi, Cebek y Sea, han enviado una carta a la vicepresidenta tercera y ministra de Transición Ecológica, Teresa Ribera, en la que le advierten de las consecuencias ‘muy negativas’ que tendrá para la industria vasca la aprobación de dicho decreto-ley.
En la misiva, los presidentes de Confebask, Eduardo Zubiaurre; Adegi, Eduardo Junkera; Cebek, Carolina Pérez Toledo, y SEA, Pascal Gómez, trasladan a la vicepresidenta tercera su “posición contraria a esta medida”.
Los presidentes de las cuatro organizaciones empresariales del País Vasco recuerdan a Teresa Ribera que “el coste de la energía es un factor fundamental para la competitividad y viabilidad” de las empresas vascas.
Por ello, consideran que la creación de una nueva tasa a toda la energía eléctrica no emisora, proporcional a la subida del coste del gas, “va a tener un impacto muy negativo en nuestros costes de electricidad”.
Para las cuatro patronales vascas “esta nueva tasa supone, a todas luces, una modificación de las reglas de juego, afectando tanto a los contratos que las empresas tienen ya firmados a precios inferiores a los del mercado actual, como a la futura contratación de electricidad que estará sujeta la volatilidad de los precios”.
“Todo ello, significa claramente alterar las reglas del juego preexistentes”, subrayan.
Los máximos representantes de Confebask, Adegi, Cebek y Sea concluyen que “las empresas de Euskadi necesitan, hoy más que nunca, un entorno regulatorio estable y conocido, más aún en estos momentos de inicio de recuperación económica tras los efectos sufridos con la pandemia”.