La vicepresidenta y ministra para la Transición Ecológica, Teresa Ribera, ha recordado que la mayoría de la cogeneración en España está cerca de alcanzar su vida útil y que deberá contar con un plan de acompañamiento de modernización basado en soluciones como las redes cerradas de electricidad.
En su intervención en comisión en el Congreso, Ribera ha dicho, en su respuesta a los grupos, que la cogeneración en España cuenta con un marco estable y predecible, con una rentabilidad garantizada por encima del 7 %.
Ha indicado que lo que ha hecho el ministerio, al que los cogeneradores acusan de haber recortado su retribución para el periodo 2020-2025 en 450 millones de euros, es el ajuste para que esté en lo que una rentabilidad razonable reconocida y no 600 millones por encima.
La ministra ha dicho que su departamento ha escuchado la preocupación de muchos titulares de plantas de cogeneración.
Además, ha recordado que la mayoría de la cogeneración está próxima a cumplir su vida útil regulatoria, en la que perciben retribución.
Ha señalado que el Plan Integrado de Energía y Clima (PNIEC) lo que prevé es que hay que tener un colchón de 1.200 horas de cogeneración, por lo que hay que contar con un plan de acompañamiento y modernización para estas industrias basado en soluciones como las redes de distribución de electricidad cerradas, pues hay que evitar "quedarnos anclados en soluciones que pueden quedarse antiguas".
Las redes cerradas son sistemas de distribución de energía eléctrica para zonas geográficas muy pequeñas y con una fuerte interrelación entre sus miembros, que permiten compartir las infraestructuras de conexión con el resto de red eléctrica y regulan su funcionamiento entre sus miembros.
Esta fórmula permite reducir los costes energéticos para todo el conjunto y mejorar la competitividad de las empresas, y ha sido una reivindicación histórica de la industria química catalana.
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