La vicepresidenta cuarta y ministra para la Transición Ecológica y Reto Demográfico, Teresa Ribera, considera que Europa debe mantener un "perfil elevado" para acelerar la acción climática en el ámbito doméstico para ser "líder de la transición verde".
Durante su intervención en la sesión inaugural de la novena edición de la Global Annual Energy Meeting, organizada por EsadeGeo, la Representación de la Comisión Europea en España y EIT InnoEnergy, Ribera ha manifestado que la ambición climática de un país o región puede "moldear su capacidad de liderazgo multilateral".
"Europa necesita más que nunca mantener su postura elevada y acelerar la acción en el ámbito doméstico si queremos seguir siendo un referente mundial y un líder de la transición verde", ha manifestado.
En la jornada online 'The Geopolitics of the Green Deal' ha participado también la comisaria de Energía de la Comisión Europea, Kadri Simson, que ha analizado las implicaciones geoestratégicas de la transición energética, así como el liderazgo de Europa en la acción climática.
Simson ha destacado las dos prioridades estratégicas en este sentido que son el objetivo de que los Veintisiete sean climáticamente neutros en 2050 y su aspiración de ser un actor global más fuerte.
"El Pacto Verde Europeo no es solo una agenda para transformar la economía y la sociedad de Europa. Tiene un impacto más allá de nuestras fronteras; es por eso que también debe ser un foco de nuestra acción exterior", ha manifestado.
La comisaria ha señalado además que garantizar el suministro de energía "no es solamente un elemento fundamental" para el desarrollo económico y social, sino también, un asunto que forma parte de las dinámicas de poder mundiales.
"El Pacto Verde no es solo una agenda para transformar la economía y la sociedad de Europa. Tiene un impacto más allá de nuestras fronteras, sobre todo, con nuestros socios más cercanos y en nuestro vecindario. Es por eso que también debe ser un foco de nuestra acción exterior: para que Europa pueda liderar esta carrera, necesitamos que otros nos sigan", ha indicado.
Por eso, ha insistido en la cooperación con los vecinos del este y del sur de la UE: los Balcanes occidentales, el Mediterráneo y África. Sin embargo, ha advertido de que el liderazgo y las alianzas con otros actores deben ir de la mano con el fortalecimiento de la autonomía estratégica de Europa. "Debemos ser capaces de adaptarnos a los nuevos desafíos que se plantean en nuestra seguridad y resiliencia energética", ha comentado la comisaria que ha recordado que hasta ahora Europa ha sido un importador de gas y petróleo.
En ese sentido, defiende que la UE debe asegurar que su dependencia de combustibles fósiles no sea reemplazada por una nueva dependencia de materias primas. A su juicio, para hacer posible el nuevo sistema energético, se debe garantizar un acceso seguro, transparente y diversificado a las materias primas críticas.
En esa línea, Ribera ha apuntado que si se quiere que la transición energética sea sostenible es "necesario" aplicar un modelo de explotación global de los recursos naturales responsable, más racional, transparente y justo.
No obstante, ha reconocido que la transición energética implica cambios en el equilibrio de poder y plantea preguntas en materia de paz, estabilidad y seguridad. Asimismo, considera que es importante seguir de cerca la sostenibilidad de las materias primas y, a la vez, poner atención en los países cuyas economías dependen de la exportación de combustibles fósiles.
"Europa debe velar por mejorar la consistencia en esta transición, tanto en el ámbito interno como en el externo, fortaleciendo la cooperación para que entre los distintos actores podamos construir un futuro mejor para todos", ha valorado.
En la sesión han participado también el presidente del Centro de Geopolítica y Economía Global de Esade (EsadeGeo), Javier Solana, y el CEO de EIT InnoEnergy, Diego Pavía.
Deja tu comentario
Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Todos los campos son obligatorios