Sáenz de Jubera (EDP España): En 2050 el mundo va a funcionar sólo con agua, viento y sol

El consejero director general de EDP España, Javier Sáenz de Jubera, considera que el carbón "lo va a tener muy complicado a partir de 2030", el gas se quedará hasta 2050 como combustible de transición y a partir de esa fecha "el mundo va a funcionar sólo con agua, viento y sol".

"En ese sentido, EDP está muy bien situada porque es una de las grandes potencias eólicas del mundo y es un poco la apuesta", ha indicado Javier Sáenz de Jubera en La Granda, donde ha participado en un curso sobre el cambio climático y la transición energética.

En su opinión, el problema no es que el carbón lo vaya a tener difícil a partir de 2030, "el problema es que hoy en Asturias la producción de carbón es muy pequeña, porque no es competitivo, nunca lo fue".

Javier Sáenz de Jubera, que ha estado diez años trabajando en Hunosa, y ha indicado que "no es un problema de mala gestión de la empresa, en absoluto, hay excelentes profesionales, siempre los hubo".

El consejero director general de EDP España ha querido hacer reflexionar a la sociedad sobre el hecho de que el gran problema de la contaminación "no es sólo, ni mucho menos, las plantas industriales o de generación, si no el transporte y los combustibles derivados del petróleo".

"En ese sentido es básico que los vehículos pasen a ser eléctricos o de gas, el futuro está ahí", ha subrayado. En su opinión, el vehículo eléctrico "va a tardar un poco" porque tiene el problema de la autonomía, que está limitada a unos 350 kilómetros, y el repostaje. Por eso, actualmente, el vehículo eléctrico se plantea más como un segundo coche para moverse, por ejemplo, por Asturias, en distancias cortas.

"En países europeos ya se está haciendo una red de puntos de carga de vehículos eléctricos interesante y el de gas tiene un papel importante porque tiene las mismas prestaciones que el de gasoil o de la gasolina y es mucho más barato", ha subrayado.

Por esa razón, cree que el vehículo de gas puede ser la transición hasta llegar al vehículo eléctrico, en torno al año 2040 o 2050.