La tormenta de nieve que sacudió a Texas (EEUU) el pasado febrero, que provocó numerosos muertos, le ha supuesto a Royal Dutch Shell un coste de 200 millones de dólares (168 millones de euros), informó este miércoles la petrolera.
El mal tiempo suspendió parte de su producción en ese estado, según la compañía, que espera producir entre 10.000 y 20.000 barriles menos de lo que normalmente bombea por día.
Esto, según la petrolera, tendrá un impacto en sus resultados correspondientes al primer trimestre del año.
El pasado febrero, Shell informó de que registró unas pérdidas atribuidas de 21.680 millones de dólares (18.252 millones de euros) en 2020, frente a los beneficios de 15.842 millones de dólares (13.323 millones de euros) el año anterior, lastrada por los bajos precios del crudo derivados de la pandemia.
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