Casi 30 años ha estado Argelia siendo el principal suministrador de gas en España. Ha llegado a cotas por encima del 60%, una dependencia total del gas argelino. Pero desde que el pasado 31 de octubre Argelia decidiera no renovar el contrato del suministro de gas por el gasoducto Magreb-Europa, el que va por Tarifa y pasa por Marruecos, Argelia ha ido poco a poco perdiendo peso.
Tanto es así que EEUU ya lo ha superado como el mayor proveedor de gas a España. Según los datos de Enagás, operador del sistema gasista, correspondientes al mes de enero, España ha importado 13.103 GWh de gas natural licuado (GNL) procedente de EEUU a través de buques a las seis regasificadoras españolas. Esto supone un 34,6% de todo el gas consumido en España.
Por su parte, Argelia sólo ha suministrado 9.620 GWh de gas, todo a través del gasoducto Medgaz que une Almería con la costa argelina. En total, algo más del 25% de la demanda nacional en enero. ¿Se acuerdan ustedes de que nos dijeron que estemos tranquilos que Argelia iba a enviar buques suficientes con GNL para sustituir el gas que accedía por el gasoducto del Magreb-Europa? Pues en enero no ha enviado ni un barco.
Esto quiere decir que si no es por el gas de fracking de EEUU, los españoles no se podrían haber calentado sus hogares durante el pasado mes. Quién lo iba a decir.
Tras ellos se sitúa Nigeria que suministró más de 5.000 GWh, un 13,3% del consumo, Rusia, con 2.178 y solo el 5,8% del total y Omán con el 5,1%. En total, en enero España y sus empresas energéticas ha comprado gas a 11 mercados diferentes.
Cambio radical a favor del GNL
Históricamente, el gas vía gasoducto era lo que más se importaba, pero tras el cierre del Magreb-Europa, el GNL ha dado la vuelta a la tortilla en el mercado de gas español.
Gracias a que España posee una gran infraestructura gasista, con seis plantas regasificadoras, puede garantizarse el suministro de gas incluso perdiendo todo el suministro desde Argelia. Ahora, el GNL ya representa más de dos tercios del gas que se consume en España, cuando hasta hace bien poco era al revés. Un dato: en Alemania no hay ni una regasificadora y depende de Rusia.
Precios más caros
El hecho de que ahora se importe más GNL que trayéndolo por gasoducto hace que los precios en el mercado ibérico de gas sean más caros. Sobre todo cuando tee traes los buques desde tan lejos. Los costes de licuefacción, transporte y regasificación encarecen bastante el precio final del gas que llega a industrias, sector eléctrico y hogares.
Según los datos del Mibgas, no veremos el precio bajar de los 70 €/MWh durante todo el año 2022, y eso teniendo en cuenta que no haya problemas de suministro por el conflicto entre Rusia y Ucrania hacia el centro de Europa.
aa
11/02/2022