Subidón de la luz para enero: la CNMC prepara unos peajes eléctricos para 2026 un 4% más caros

La factura eléctrica afrontará un encarecimiento a partir del 1 de enero de 2026. La Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC) ha puesto en audiencia pública su propuesta de peajes de transporte y distribución para el próximo año, que incorpora un aumento global cercano al 4% derivado del incremento de los costes regulados que deben recuperarse a través de estos cargos.

En concreto, la retribución asignada para financiar las redes eléctricas ascenderá en 2026 a 6.608 millones de euros, frente a los 6.349 millones considerados para 2025, lo que supone un alza del 4,1%.

El mayor peso del incremento recae sobre la red de transporte, cuya retribución asignada sube un 12,1%, al pasar de 1.056,9 millones a 1.184,8 millones de euros.

Retribución de la distribución

Este fuerte repunte se explica por la incorporación de nuevos costes asociados a la operación del sistema y al desarrollo de infraestructuras críticas, así como por los ajustes derivados de ejercicios anteriores. Por el contrario, la retribución de la distribución, que concentra la mayor parte del coste por volumen, registra un incremento más moderado, del 2,5%, al situarse en 5.423,2 millones frente a los 5.292,3 millones previos.

Aunque la demanda prevista para 2026 crece ligeramente —tanto en energía como en potencia contratada— y esto tiende a repartir el coste entre más consumo, el resultado neto continúa siendo de aumento para la mayoría de consumidores. La CNMC reconoce que las variables de facturación más altas reducen los términos de potencia y energía, pero no lo suficiente como para compensar el incremento de los costes regulados.

Efecto en grupos tarifarios

El efecto sobre los distintos grupos tarifarios no será homogéneo. Según las estimaciones de la propia CNMC, la facturación asociada a los peajes crecerá entre el 0,6% y el 2,8% en la mayoría de tarifas de baja y alta tensión, con la excepción del peaje 6.3 TD, que experimentará una ligera caída del 3,9% debido a particularidades en su asignación de costes. Para las tarifas domésticas (2.0 TD), el aumento será cercano al 0,6%, mientras que los grandes consumidores industriales en alta tensión (6.4 TD) afrontarán incrementos de hasta el 2,8%.

En términos de recaudación total por peajes, la propuesta refleja también un incremento relevante: de 6.349 millones en 2025 a 6.619 millones de euros en 2026, si se consideran conjuntamente transporte y distribución, lo que refleja un crecimiento del 4,3% en los ingresos previstos para cubrir los costes regulados. El peso de la subida vuelve a concentrarse en los términos asociados al transporte, que repuntan más del 12% para prácticamente todos los grupos tarifarios, frente al 2,6% de la distribución en la mayoría de ellos.

La actualización llega en un contexto marcado por la necesidad de ampliar y reforzar las infraestructuras eléctricas para integrar más renovables, garantizar la seguridad de suministro y atender el incremento de la demanda. A ello se suma la incorporación progresiva de desvíos y ajustes de ejercicios anteriores, que también influyen sobre la cifra final a recuperar mediante peajes.