La Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC) ha lanzado una consulta pública específica para la revisión de la metodología de cálculo de los peajes eléctricos, recogida en la Circular 3/2020, con vistas al periodo regulatorio 2026-2031. El objetivo es adecuar los peajes de acceso a las redes eléctricas a la creciente demanda de flexibilidad energética, derivada del auge de las baterías de almacenamiento y la integración de energías renovables.
Con el creciente desarrollo del almacenamiento de energía y la cada vez mayor necesidad de electrificar la economía, la CNMC busca optimizar las señales de precios para los usuarios de las redes, favoreciendo un sistema más eficiente y equitativo. Las baterías, consideradas cruciales para el proceso de descarbonización, ocupan un lugar central en este proceso, al igual que el autoconsumo y la generación distribuida.
Papel clave
La consulta pública responde a la necesidad de aclarar y actualizar el tratamiento de las baterías de almacenamiento en la normativa vigente. La Circular 3/2020 exime actualmente del pago de peajes a las baterías conectadas a la red de transporte o distribución por la energía inyectada a la red. No obstante, la CNMC ha identificado inconsistencias en el tratamiento regulatorio de estas infraestructuras, lo que ha llevado a la convocatoria de este proceso de revisión. Uno de los temas más discutidos es la posible doble imposición que sufren las baterías por la energía consumida y posteriormente vertida a la red.
Algunos agentes del sector han solicitado una revisión más profunda que contemple exenciones transitorias para las baterías, con el fin de impulsar aún más su desarrollo en España, y alinear su tratamiento con el del hidrógeno verde. Además, se propone eliminar la doble imposición sobre la energía almacenada, así como aclarar el alcance de las exenciones de peajes, buscando una mayor coherencia con la legislación vigente.
Peajes
Con el aumento proyectado de las inversiones en redes eléctricas, impulsado por la electrificación, la CNMC prevé que los peajes eléctricos serán una herramienta fundamental para garantizar que los nuevos entrantes, tanto generadores como consumidores, se conecten en los puntos de la red que supongan menores costes para el sistema. La consulta también plantea cómo financiar los servicios de ajuste y las inversiones necesarias, evitando que los consumidores asuman una carga excesiva.
Además de las baterías, la CNMC está considerando la posibilidad de revisar la estructura de peajes para promover el uso eficiente de la red y adaptarse a la variabilidad de la demanda. Se plantean modificaciones en los periodos horarios y la estructura de facturación, con el fin de proporcionar señales de precios más precisas a los usuarios y fomentar la flexibilidad en el uso de la red eléctrica.
Hoja de ruta
Este nuevo marco normativo se enmarca dentro del compromiso de España con la transición energética y la descarbonización, alineado con las directrices europeas y los objetivos nacionales de reducción de emisiones. El autoconsumo y la producción distribuida son áreas clave, y la CNMC busca garantizar que los peajes no desincentiven la generación renovable ni la respuesta a la demanda.
La consulta pública estará abierta a contribuciones del sector hasta finales de 2024, y las modificaciones propuestas se someterán posteriormente a un trámite de audiencia. Se espera que las nuevas reglas entren en vigor a partir de 2026, marcando un nuevo hito en la regulación del mercado eléctrico español.
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