La economía suiza, aún afectada por la subida global de precios de la energía que se inició en 2022 con la invasión rusa de Ucrania, deberá seguir reduciendo su consumo de gas natural este invierno hasta en un 15%, ha informado este miércoles el Consejo Federal (Ejecutivo).
El pasado inverno, el país redujo el consumo de gas un 22% y un año después incluso logró aumentar ese recorte al 23%
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En su reunión semanal, el Gobierno suizo ha fijado este objetivo voluntario para el periodo octubre 2024-marzo 2025, tras considerar que el mercado continúa afectado por las tensiones geopolíticas.
Con esta medida, Suiza se une a metas similares fijadas por la Unión Europea, que en marzo prolongó un año su objetivo voluntario de reducción de la demanda de gas, también del 15% con respecto a la media del lustro 2017-2022.
Tres cuartas partes del consumo anual de gas en Suiza corresponden a la calefacción invernal, por lo que esta reducción continuará afectando a domicilios privados, industrias, servicios y administración pública, según la agencia de noticias helvética ATS.
El consumo de gas natural de Suiza
En el invierno 2022-2023, Suiza redujo el consumo de gas un 22% y un año después incluso logró aumentar ese recorte al 23%.
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Suiza mantiene acuerdos con las vecinas Italia y Alemania que prevén ayuda solidaria entre estos países en caso de penuria energética en servicios esenciales tales como hospitales o urgencias.
Antes de la guerra, un 47% del gas que consumía Suiza procedía de Rusia (aunque gran parte de éste llega a través de países vecinos como Francia y Alemania), mientras que Noruega era la segunda mayor proveedora (24%) y la UE la tercera (19%).
Tras la invasión de Ucrania, Suiza comenzó a sondear fuentes alternativas al gas ruso, principalmente Qatar, uno de los mayores exportadores de gas natural licuado.
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