La innovación en el transporte está llegando a tal límite que cualquier medio de transporte podría ser totalmente autónomo en el futuro. Ya no se necesitará la mano del hombre para transportar mercancías.
Un claro ejemplo de ello es T-pod, un camión 100% eléctrico, autónomo que tiene como pecualiaridad que no posee cabina. Ni volante, ni pedales ni nada con lo que pueda ser conducido.
Únicamente podrá ser dirigido por control remoto. Pero el objetivo de la empresa sueca Einride es que el camión se traslade de una ciudad a otra solo, sin contaminar nada.
Este prototipo de camión autónomo no es muy grande. Podría cargar unas 20 toneladas de peso, muy parecido en tamaño al Clase 8.
Einride está trabajando para que el primer T-pod haga la primera entrega en 2020. El trayecto que realizará será entre las ciudades de Gotemburgo y Helsingborg. Lo que pretende la compañía es poner en marcha unos 200 camiones en este trayecto en el futuro, y llenar la carretera de puntos de recarga para dichos camiones.
El transporte de mercancías por carretera del futuro parece no contar con los camioneros. Un problema para muchos países del mundo donde millones de trabajadores se echan a la carretera a diario.