En 2021 la Comisión de Comercio Internacional de EEUU (USITC, por sus siglas en inglés), a raíz de una denuncia de la Wind Tower Trade Coalition, una asociación de fabricantes estadounidenses de torres eólicas, investigó y emitió un informe por posibles prácticas de 'dumping'.
Señalaba a una serie de empresas españolas. En concreto, acusaba a siete compañías españolas o con plantas de fabricación en España -Nordex (filial de Acciona), Kuzar, Haizea, Vestas, Siemens Gamesa, Windar y Proyectos Integrales y Logísticos- de haber vendido torres eólicas con un supuesto margen de "dumping" del 73%, que fue el arancel que, al final, se impuso a las importaciones de torres eólicas desde España.
"En este caso concreto, el arancel se fijó en un 73% lo que obligó a nuestras empresas a direccionar su negocio a mercados alternativos, principalmente el mercado europeo, que pudo cubrir dicha demanda", señalan fuentes de AEE a El Periódico de la Energía.
Al parecer, la cosa iba más allá de fabricar torres eólicas. El caso es que Siemens Gamesa y Haizea decidieron recurrir este arancel del 73% que les parecía abusivo. Y ganaron el pleito. Hace dos años, un juez del Tribunal de Comercio Internacional de Estados Unidos anuló el arancel y ordenó que fuese recalculado.
Hoy el Departamento de Comercio, con Donald Trump en la Casa Blanca, ha decidido interponer unos aranceles a la compra de torres eólica fabricadas en España.
galan
02/10/2025