Más de una cuarta parte de las plantas de energía nuclear de EEUU no ganan suficiente dinero para cubrir sus costes operativos, lo que aumenta la amenaza de que se produzcan más jubilaciones anticipadas.
De las 66 centrales nucleares que operan en EEUU, 24 están programadas para ser cerradas o probablemente no ganarán dinero hasta el 2021, según Nicholas Steckler, analista de Bloomberg New Energy Finance. Las centrales en riesgo tienen una capacidad total de generación de 32,5 gigawatts, más de un cuarto de toda la flota, escribió Steckler en un informe.
Steckler y el coautor, Chris Gadomski, calculan que cubrir las brechas de ingresos de estas centrales costaría aproximadamente 1.300 millones de dólares al año. El estudio se ha publicado después de otro análisis similar publicado en marzo, según el cual la mitad de la capacidad energética de carbón se encuentra igualmente en situación crítica.
Sin embargo, la situación no es para nada preocupante para los operadores nucleares. Se espera que la planta nuclear estadounidense promedio gane dinero antes de impuestos, especialmente en la costa este. Y la industria ha sabido convencer a los encargados de formular las políticas energéticas en Nueva York, Illinois y Nueva Jersey para que tomen medidas para rescatar plantas en apuros gracias a su generación libre de emisiones y su preocupación por la pérdida de empleos.
Además, el Departamento de Energía de EEUU (DoE) está evaluando una solicitud presentada el pasado mes de marzo de la unidad de potencia de FirstEnergy Corp. para obtener ayuda del gobierno para ayudar a mantener en línea las centrales eléctricas nucleares y de carbón que pierden dinero.
Dicho esto, la industria nuclear se ve cada vez más amenazada por la lenta demanda de energía, el gas natural barato y el aumento de la energía renovable, especialmente en el medio oeste, donde la energía eólica está en plena ebullición.
Manuel Garcia (@TURBOMOTOR2000)
25/05/2018