El Congreso de los Diputados ha debatido la moción de Vox para instar al Gobierno a impulsar un plan de Soberanía Energética "sin ecofanatismo", aunque el resto de formaciones han criticado la iniciativa, que contempla denunciar acuerdos firmados como el de París, de los que el PP se ha sentido "profundamente orgulloso".
El diputado de Vox Ricardo Chamorro ha insistido en que la soberanía energética es un pilar fundamental para la estabilidad económica y la competitividad industrial, pero ha censurado que esta soberanía sólo puede alcanzarse si se deroga "la normativa ecofanática, que ha facilitado las cosas a los enemigos de Occidente".
Chamorro ha urgido a alcanzar una mayor autonomía energética, sobre todo a través de la energía nuclear, y ha incidido en que "mientras Europa refuerza ese tipo de energía, España defiende el desmantelamiento", una política que ha calificado de "suicidio energético".
El socialista Daniel Senderos ha lamentado que Vox siga "con el mantra de que la nuclear va a salvar el mundo", pero ha reivindicado que "no es ni limpia, ni segura, ni barata" y ha destacado que la transición energética de futuro para el país.
La Soberanía Energética
Asimismo, ha destacado que el 40% del uranio es ruso, "por lo que eso no casa con la autonomía" que pregona Vox.
Desde el PP, Juan Diego Requena ha censurado que la actual ministra actual vicepresidenta tercera y ministra para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico Sara Aagesen es "corresponsable" junto a su antecesora en ese cargo y ahora vicepresidenta de la Comisión Europea, Teresa Ribera de "las subidas en butano, luz, diésel, gasolina y también de que la pobreza energética esté disparada".
Asimismo dijo sentirse "profundamente orgulloso" de los tratados firmados, a la vez que ha dicho que Vox "confunde y señala la lucha contra el cambio climático" y ha criticado "la transición intransigente, cara y contraria a los intereses" del Ejecutivo en lugar de una transición que aproveche las posibilidades del país.
Asimov
12/03/2025