La petrolera YPF, controlada por el Estado de Argentina, pondrá el foco durante los próximos cuatro años en sus áreas dentro de la gigantesca formación de hidrocarburos no convencionales de Vaca Muerta, en el suroeste del país.
Este será uno de los pilares del plan a cuatro años que se propone implementar la nueva gestión de la empresa tras la asunción de Javier Milei como presidente de Argentina, en diciembre pasado.
La nueva conducción de YPF, con Horacio Marín, expresidente de Exploración y Producción de la petrolera argentina Tecpetrol (grupo Techint), como nuevo presidente y director ejecutivo de la empresa, se plantea como objetivo cuadruplicar en cuatro años el valor de la acción de la compañía, que este martes cerró a 16,50 dólares en la Bolsa de Nueva York.
El plan hará foco en Vaca Muerta, la segunda mayor reserva mundial de gas no convencional y la cuarta de petróleo de este tipo, cuyo desarrollo masivo es liderado por YPF, la mayor productora de hidrocarburos de Argentina.
La apuesta a los no convencionales tendrá como contracara una desinversión en áreas convencionales muy maduras o marginales, con alto coste operativo y que YPF proyecta traspasar a otras empresas interesadas en estos activos, incluso pequeñas y medianas.
La compañía también hará una revisión de las participaciones que tiene en diversas empresas.
Asimismo, buscará aumentar la producción y lograr una operación más eficiente, tanto en exploración y producción, como en refino y comercialización.
Además, buscará reformular el proyecto con la malaya Petronas para producir y exportar gas natural licuado (GNL).
En septiembre de 2022, YPF y Petronas firmaron un acuerdo con vistas a invertir 10.000 millones de dólares (unos 9.292 millones de euros) en una primera etapa para construir en Argentina una planta de licuefacción de gas extraído de Vaca Muerta.
El plan para producir GNL incluye la construcción de gasoductos y otras infraestructuras, la industrialización, la comercialización y la logística internacional.
La nueva conducción de YPF cree que el desarrollo del GNL en Argentina solo será rentable y competitivo si se viabiliza a través de un único proyecto compartido con otras grandes petroleras que operan en el país.
Para ello, la nueva gestión planea reunirse en marzo próximo con representantes de cuatro o cinco petroleras privadas que operan en Argentina para proponerles sumarse al proyecto, en el que YPF conservaría una participación del 50%.
La flamante conducción de la petrolera controlada por el Estado argentino cree que es posible que para 2030, bajo el liderazgo de YPF, Argentina alcance exportaciones de hidrocarburos por 30.000 millones de dólares, sin considerar el potencial del GNL.
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