Alemania establece la alerta de suministro de gas en su nivel más bajo

El gobierno alemán ha reducido la alerta de suministro de gas al nivel mínimo gracias a una mejora significativa en la situación del suministro, según ha declarado el Ministerio de Economía. El país activó la segunda de las tres fases de crisis de la alerta tras la invasión rusa de Ucrania en 2022.

En ese momento, Rusia todavía era el principal proveedor de gas natural de Alemania y comenzó a utilizar sus reservas energéticas como arma en un intento de socavar la asistencia a Ucrania por parte de los estados de Europa occidental.

"No se prevé una obstrucción del suministro de gas", declaró el ministerio, añadiendo que "el gas natural está suficientemente disponible en el mercado mundial". Los precios han disminuido considerablemente desde 2022, añadió el ministerio, gracias al éxito de los esfuerzos conjuntos europeos para reemplazar el suministro ruso

Crisis superada

“Hemos logrado superar la crisis energética causada por la agresión rusa contra Ucrania”, declaró la ministra de Economía, Katherina Reiche. La nueva infraestructura para la importación de gas natural licuado (GNL), la diversificación de los países de origen, la reducción de precios y la infraestructura nacional de almacenamiento de gas contribuyeron a la mejora de la situación, explicó Reiche. “Haremos todo lo posible para garantizar la seguridad del suministro”, añadió. Sin embargo, dado que no se pueden descartar por completo los riesgos para el suministro, el país ha decidido mantener el nivel de alerta más bajo.

La asociación de la industria energética BDEW afirmó que el cambio del nivel de alerta no tendría consecuencias directas en el mercado del gas, ya que medidas como la ampliación de la disponibilidad de centrales eléctricas de carbón alternativas ya habían finalizado en 2024.

La directora de BDEW, Kerstin Andreae, afirmó que sería lógico mantener el nivel de alerta más bajo para tener en cuenta la volátil situación geopolítica. “El objetivo de la Comisión Europea de prescindir por completo del suministro de gas natural procedente de Rusia en el futuro refuerza aún más los esfuerzos de diversificación”, declaró Andreae.

Según BDEW, 98 teravatios hora de gas ruso se importaron oficialmente a la UE en el primer trimestre de 2025 (el 13 % de todas las importaciones de gas de la UE), tres años después de que el presidente ruso, Vladimir Putin, ordenara la guerra contra el vecino occidental de su país. "Esto significa que la cuota de gas natural ruso es manejable y puede sustituirse por otras fuentes", afirmó Andreae, añadiendo que a los países del sureste de Europa les podría resultar más difícil recurrir a proveedores alternativos.

Los precios futuros del gas en 2026 serán de 38 euros por megavatio hora (MWh), el doble que antes de la invasión de Ucrania, pero muy por debajo del pico de precios de más de 300 euros por MWh de 2022, según el grupo industrial.