Alemania necesitará invertir unos 110.000 millones de euros en la expansión y actualización de su red eléctrica para 2050 a fin de satisfacer las demandas de la transición energética, según un estudio encargado por E.ON. Se necesitarían unos 32.000 millones de euros de esa cantidad para 2030, añadió en un comunicado. Se deben integrar más sistemas solares y eólicos en la red e infraestructura de carga para la movilidad eléctrica, así expandir las bombas de calor y los sistemas de almacenamiento de energía.
Sin estas inversiones, se podrían incurrir en “costes de seguimiento” de 4.200 millones de euros al año debido a la sobrecarga de unas redes incapaces de absorber la electricidad generada mediante energías renovables. “La política y la regulación ahora deben marcar el rumbo del crecimiento de las redes. Si Alemania quiere lograr sus objetivos de protección del clima y hacer que la transición energética sea un éxito, las redes de distribución de electricidad deben expandirse y modernizarse”, dijo E.ON en un comunicado, en el que añadía: “Si las inversiones en redes eléctricas no se realizan de manera consistente y a largo plazo hoy, ya no podrán manejar la electricidad generada a partir de energías renovables”.
El estudio, realizado por la Universidad RWTH Aachen y Frontier Economics en nombre de E.ON, dijo que el riesgo de sobreinvertir en la actualidad era bajo, porque si la red se desarrollaba más de lo necesario, solo una fracción de los costos adicionales incurridos se produciría por infrainversión.
E.ON , el mayor operador de redes de distribución de electricidad en Alemania, dijo que había conectado alrededor de 77 gigavatios de capacidad de energía renovable a sus redes en Alemania y agregó que invertiría alrededor de 6.600 millones de euros en las redes alemanas durante los próximos tres años.
El año pasado, Alemania aprobó una “ley de aceleración de la expansión de la red” para asegurarse de que las líneas necesarias se completen para 2025 a fin de reducir los costosos procedimientos de estabilización debido a bloqueos de la red.
La expansión de la red se ha enfrentado a protestas de los residentes locales y los gobiernos estatales, que han presentado impugnaciones legales a los planes en algunos casos. El gobierno planea abastecer el 65% de la demanda de energía a partir de energías renovables para 2030, lo que requerirá una red eléctrica más flexible para hacer frente a la producción y la demanda fluctuantes.