Almaraz asegura que existe una "necesidad imperiosa" de prorrogar la vida de la central nuclear

El alcalde de Almaraz (Cáceres), Juan Antonio Díaz, ha defendido este miércoles que existe una "necesidad imperiosa" de prorrogar la vida útil de la central nuclear cacereña (CNA) por lo que ha hecho un llamamiento al Gobierno central y el titular de la instalación para que trabajen en ese sentido.

Díaz ha participado en la presentación de un estudio de impacto socioeconómico del cierre de la CNA, que ha tenido lugar este miércoles en la localidad que alberga la instalación, con la presencia de distintos responsables políticos tanto del ámbito regional como provincial y local.

Dicho informe ha sido realizado por la empresa Paypertink a petición de la Asociación Española de Municipios en Áreas de Centrales Nucleares y almacenamientos de residuos radiactivos (AMAC).

El futuro de Almaraz

En declaraciones a Efe, el primer edil ha explicado que la realización del citado informe está enmarcado en "la lucha iniciada por todos los municipios de la zona para conseguir la continuidad de la actividad en la central nuclear de Almaraz".

"Nosotros creemos y defendemos que la central debe prorrogar su vida útil más allá de 2028, por eso esperamos que las partes implicadas, como son el Gobierno central y los titulares de la instalación, estudien la posibilidad de ampliar la actividad hasta los 80 años, como están haciendo otros países de Europa", ha subrayado.

Díaz ha calificado de "necesidad imperiosa" que la central siga abierta, “ya que unas 50.000 personas de toda la zona trabajan directa o indirectamente para la CNA, por lo que su cierre supondrá una grandísima pérdida".

El alcalde ha recordado que la Asamblea de Extremadura ha apoyado la continuidad de la CNA, "por lo que ahora hacemos un llamamiento al Gobierno central y a los propietarios para que trabajen en el estudio de viabilidad que posibilite la ampliación del plazo".

Por su parte, el vicepresidente de AMAC, Alfons García, ha indicado que el objetivo principal del estudio es plantear "qué consecuencias tiene un cierre de una empresa tan importante como la central nuclear en toda la comarca desde el punto de la de ocupación y del balance demográfico".

"También debe servir para que nos demos cuenta de cuáles son las oportunidades que se pueden generar a raíz de todo este proceso", ha agregado.

García ha afirmado que durante muchas décadas en los territorios con centrales nucleares, "la presencia de las mismas ha contribuido a que no hayamos sido capaces de desarrollar nuestras propias capacidades y recursos endógenos y que no hayamos buscado formación y conocimiento fuera de la central".

"Ahora de lo que se trata es de ir desconectando de esta presencia tan grande de las centrales en los territorios y ser capaces de crear una diversificación económica más estructurada y vertebrada y que garantice la continuidad de la ciudadanía en los territorios", ha defendido.

A su juicio, lo que hace falta es "propiciar una concertación territorial para trabajar en bloque y buscar la coordinación con las administraciones superiores a los municipios, algo para lo que, afortunadamente, tenemos tiempo porque esto no se hace de un día para otro".