La compañía Chesapeake Energy, la segunda productora de gas natural de Estados Unidos, ha asegurado que no tiene intención de declararse en bancarrota en un comunicado en el que ha abordado las informaciones publicadas en varios medios que apuntaban a esta posibilidad.
"Chesapeake actualmente no tiene planes de declararse en bancarrota y está intentando agresivamente maximizar valor para todos sus accionistas", ha asegurado la compañía.
En concreto, Chesapeake hacía referencia a las informaciones que se hacían eco de un informe emitido por Debtwire, en el que asegura que la compañía ha contratado a un equipo de abogados para analizar las posibilidades de la compañía.
En este sentido, la gasista ha subrayado que el equipo de abogados en cuestión forma parte del consejo de la compañía desde el año 2010, por lo que "continúa aconsejando a la compañía mientras intenta fortalecer más su balance".
Los rumores en torno a una posible bancarrota de la compañía han provocado que su cotización haya llegado a desplomarse más de un 50%, al caer a 1,50 dólares frente a los 3,06 dólares con los que cerró la sesión la semana pasada.
En su último trimestre fiscal, Chesapeake registró pérdidas por 4.695 millones de dólares (4.206 millones de euros), frente al beneficio neto atribuido de 169 millones de dólares (151 millones de euros) que obtuvo el mismo periodo del año anterior, en unos resultados que la compañía relacionó con la caída de los precios de las materias primas.
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