Un informe reciente reveló que China está construyendo el equivalente al doble de la capacidad de energía solar y eólica que el resto del mundo combinado, con 180 gigavatios (GW) de energía solar y 159 GW de energía eólica en construcción.
Este total de 339 GW supera a las infraestructuras de 40 GW en construcción en Estados Unidos, según el Global Energy Monitor (GEM), un organismo dedicado al seguimiento de la energía global.
El estudio, que se centró en proyectos de energía solar con una capacidad de 20 megavatios (MW) o más, sugiere que el volumen total de energía solar en China en construcción podría ser mucho mayor, ya que los centros de energía solar de pequeña escala representan aproximadamente el 40 % de la capacidad solar del país asiático.
GEM calcula que la capacidad en renovables bajo construcción en China podría ser suficiente para abastecer a toda Corea del Sur, la décimocuarta economía del mundo.
A nivel provincial, los datos de GEM revelan que las provincias del noroeste y norte continúan dominando la instalación de energía solar y eólica a gran escala.
Mientras tanto, la solar distribuida está transformando rápidamente el paisaje de provincias como Jiangsu (este), Henan (centro), Zhejiang (este) y Anhui (este).
Liderazgo
Estos hallazgos resaltan la posición de liderazgo de China en la producción de energía renovable a nivel mundial, en un momento en el que Washington y Bruselas han expresado su preocupación por lo que consideran competencia desleal en el sector de las renovables por parte de China, a quien acusan de un "exceso de capacidad industrial" en la fabricación de paneles solares.
Entre marzo de 2023 y marzo de 2024, China instaló más energía solar que en los tres años anteriores combinados, y más que el resto del mundo combinado en 2023.
Está previsto que China alcance 1.200 GW de capacidad instalada de viento y solar para finales de 2024, seis años antes de las previsiones gubernamentales.
Objetivo
China se ha fijado el objetivo de alcanzar el pico de emisiones de carbono antes de 2030 y la neutralidad de carbono antes de 2060, lo que implica una transformación de su modelo energético, actualmente dominado por el carbón.
Según GEM, la citada dependencia del carbón hace que China vaya a necesitar instalar todavía más capacidad renovable si quiere cumplir con sus objetivos de reducción de emisiones.
La organización cita otros desafíos de la red energética de China, entre los que figura la "insuficiencia de líneas de transmisión de ultra alta tensión" para entregar la energía renovable desde el norte y el noroeste al centro y sureste de China, donde se concentra la demanda.
Hernan
11/07/2024