El Gobierno chino ha pedido a los bancos del país que dejen de prestar a las carboneras y acerías que hayan sufrido pérdidas, para reducir los problemas de exceso de capacidad productiva que sufren estos sectores.
Las entidades financieras deben garantizar el crédito, sin embargo, a aquellas compañías que hayan demostrado ser competitivas, según recoge un documento de la Comisión Reguladora de la Banca de China divulgado por la agencia oficial Xinhua.
La directiva advierte a bancos y otras instituciones financieras de que está prohibido conceder créditos a las empresas siderúrgicas y del carbón que hayan aumentado su capacidad de producción, así como a las llamadas compañías "zombis", económicamente inviables.
En cambio, incentiva que se faciliten préstamos a las firmas que se hayan sometido a procesos de fusión o reestructuración.
Además, el regulador bancario chino instó a reestructurar la deuda que tengan los bancos de empresas de estos sectores para garantizar la estabilidad financiera del país.
El Gobierno chino anunció a principios de año que, para aliviar los problemas de exceso de capacidad productiva de su industria pesada, se proponía recortar su capacidad de producción de acero entre 100 y 150 millones de toneladas anuales para 2020, así como la de carbón en 500 millones de toneladas durante los próximos años.
A finales de noviembre, el Consejo de Estado (Ejecutivo) dio por cumplidos sus objetivos para este año en esta materia, con una reducción de capacidad de producción de 45 millones de toneladas de acero y de 250 millones de toneladas de carbón.
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