Mi experiencia profesional durante casi 15 años en el terreno de la energía a nivel Europeo me ha permitido liderar proyectos muy interesantes a la vez que me ha dado acceso a tener la ocasión de pulsar de primera mano y de involucrarme en los desarrollos normativos que ocurren en cada país para ser capaz de valorar en profundidad no sólo las oportunidades locales sino también el actual impulso global de la Unión de la Energía y del Clima.
Y en este contexto y siendo un tema de actualidad y con gran potencial, he creido oportuno compartir mis **reflexiones sobre **las recientes subastas de energía renovables celebradas por OMIP en Portugal.
Así pues, a finales del pasado mes de julio, Portugal celebró unas subastas para facilitar el desarrollo de energía de fuentes renovables en el país.
El diseño de estas subastas, con colaboración de una consultora especializada de referencia en el sector Europeo, **permitieron cumplir con varios objetivos fundamentales **para la economía en general, para su descarbonización y para el interés del consumidor final que pretendo resumir a continuación con objeto de poder valorarlas en futuros diseños:
Objetivos fundamentales alcanzados:
i) Desvincular del precio final de la electricidad el coste de las emisiones:
En mi opinión, este objetivo es el principal teniendo en cuenta que la normativa Europea establece que el **precio mayorista debe ser marginal **y, en consecuencia, el coste de generación de la instalación menos eficiente necesaria para cubrir la demanda (normalmente, una tecnología emisora) fija el precio de toda la energía consumida. La celebración de subastas renovables específicas permiten que **los precios resultantes no incorporen este coste de las emisiones **de gases de efecto invernadero (ie. CO2) que queda internalizado en el precio mayorista de los mercados organizados.
ii) Conseguir transparencia de precios:
Las **subastas de carácter descendente **celebradas han permitido que los propios agentes participantes revelaran sus **precios reales **de forma transparente para las características de recursos naturales y para la latitud de los emplazamientos seleccionados. En efecto, cada agente cuenta con una estructura de financiación (eg. deuda vs. recursos propios) y con unos costes de inversión completamente particulares que, en función de su tasa de retorno deseada, ha ofertado libremente para resultar asignatario.
iii) Reducir especulación en los puntos de conexión:
Las condiciones de la subasta también han permitido **reducir significativamente la especulación **en cuanto a los puntos de conexión, puesto que éstos se han asignado en las 25 parcelas establecidas inicialmente y en puntos específicos de despacho de forma conjunta con los proyectos reales adjudicatarios.
iv) Aumentar la competencia y generar confianza a los nuevos entrantes:
Las compañías adjudicatarias (https://leiloes-renovaveis.gov.pt/) no tienen sólo su origen en **Portugal **y en España sino que también se han adjudicado proyectos empresas de Francia, Alemania, Reino Unido y de los Estados Unidos.
Además, al tratarse de una subasta estructurada y organizada, ha permitido aumentar la confianza de aquéllos nuevos entrantes que no conocen en profundidad determinados aspectos del mercado.
El camino a seguir:
En mi opinión, éste es el camino a seguir en adelante en la Unión Europea, con matices y con particularidades en cada Estado Miembro, si queremos seguir incorporando estas fuentes de generacion y contar con industrias competitivas que colaboren a mantener e incrementar la actividad económica.
Se trata, sin duda, de la tendencia que deben seguir los Estados Miembros en un entorno en el cual la incorporación del coste de las emisiones (donde ya llegan a suponer algo más del 25%) en el coste final de la electricidad ha evidenciado la distinta estructura de costes de la energía eléctrica a partir de combustibles fósiles y aquélla que se genera a partir de fuentes renovables.
Ejemplos relevantes de éxito:
Estas reflexiones se sustentan también en dos ejemplos muy evidentes del desarrollo de contratos a largo plazo (o PPAs) en dos de los mercados eléctricos más competitivos de Europa: **Noruega **y Francia.
En cuanto a Noruega, sus precios son muy competitivos debido a que más del 90% de **su generación es hidráulica **y, como tal, apenas internaliza los costes de las emisiones. Éste, en mi opinión, es el motivo principal por el cual los **contratos PPA **de esta naturaleza han tenido tanto éxito en este país hasta la fecha.
Y en cuanto a Francia, también su generación eléctrica es muy baja en emisiones, representando la energía nuclear en torno al 80% del total. En este sentido, el precio asignado a esta tecnología a través del **mecanismo ARENH **(Accés Regulé d'Energie Nucleaire Historique) también resulta muy competitivo y lleva vigente desde el 2011. Este mecanismo **no deja de ser una analogía de los contratos bautizados como PPAs **y su desarrollo ha sido exponencial en Francia hasta tal punto que este año 2019 no ha habido suficiente volumen para suministrar a todos los consumidores que la han solicitado.
En resumen, siendo la **Península Ibérica **tan **rica en recursos naturales y renovables como el sol y el viento, en mi opinión, diseñar unas subastas adecuadamente **reproduciendo la reciente experiencia y las lecciones aprendidas en Portugal, resultará una **excelente oportunidad **para transformar el país mejorando la competitividad de nuestra economía, generando empleo y cumpliendo con los objetivos de medio ambiente establecidos.
_Juan García-Marquina es Energy Director de Celsa Group. _
Miguel
02/10/2019