Wood Mackenzie ha dicho que con la Ley de Reducción de la Inflación (IRA) impulsando la competitividad económica de las energías renovables, las adiciones anuales de capacidad casi se triplicarán en 10 años a 110 GW.
En su intervención en la conferencia RE+ en Las Vegas, Chris Seiple, vicepresidente de energía y energías renovables de Wood Mackenzie, dijo: " El IRA ha hecho que las energías renovables sean muy competitivas con otras tecnologías y precios mayoristas de energía. Como resultado, estamos viendo una avalancha de terrenos para sitios de desarrollo y un resurgimiento de la industria manufacturera estadounidense para apoyar a la industria de las energías renovables”.
"Todavía quedan desafíos pendientes, pero en general, las energías renovables de bajo costo presentan una gran oportunidad para la inversión, y proyectamos que las adiciones anuales de capacidad en 10 años casi triplicarán lo que son ahora", añadió.
Según Wood Mackenzie, el costo total de los créditos fiscales IRA hasta 2050 se estima en 1,9 billones de dólares.
Crecimiento económico
Esto proporcionará la base económica para el crecimiento, pero no asegurará una transición totalmente fluida, añadió Seiple. "La complejidad de convertir la IRA en reglas detalladas ha dificultado la inversión inicial y ha ralentizado el desarrollo, pero la proyección a largo plazo es sólida. En última instancia, la economía no será el principal desafío para el crecimiento futuro, sino que cuestiones como las colas de interconexión, la capacidad de transmisión y la escasez de mano de obra podrían causar cuellos de botella".
Según Wood Mackenzie, algunas tecnologías avanzadas de red, como las clasificaciones de línea directa (DLR), tienen el potencial de proporcionar soluciones de transmisión a corto plazo y ampliar la capacidad de la red.
Algunos estudios sugieren que los DLR pueden superar las calificaciones estáticas entre el 90% y el 95% del tiempo y lograr aumentos en la capacidad de más del 30%, agregó.
Seiple añadió: "Hay soluciones disponibles ahora que pueden ayudar a aliviar los problemas actuales, pero no están consiguiendo tracción lo suficientemente rápido. Aparte de estos problemas, también nos enfrentamos a fenómenos meteorológicos extremos cada vez mayores, que han añadido presión a las redes en todo el mundo. A medida que superamos estos desafíos, proyectamos que el IRA reducirá significativamente las emisiones de carbono y dará como resultado un sector eléctrico libre de emisiones para 2032, lo cual es un progreso, pero no suficiente para encaminarnos a limitar suficientemente el alcance del cambio climático".
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