El último favor a Florentino Pérez ya se ha hecho realidad. El Gobierno ha aprobado la indemnización por el almacén de gas Castor. En total, 1.350 millones de euros. En un principio, lo aportará la banca, pero finalmente se trasladará a la factura del gas por lo que todos los consumidores acabarán pagando la desastrosa gestión de Florentino Pérez y de los gobiernos del PSOE y PP. Cabe recordar que Castor produjo más de 500 mini terremotos en la costa levantina.
La operación queda tal y como contó El Periódico de la Energía el pasado 11 de septiembre. El Gobierno, en cumplimiento de la ley, indemnizará a Escal, filial de ACS, con 1.400 millones de euros. De esta manera, Florentino Pérez podrá abonar a los bonistas el próximo 30 de noviembre. Industria lo primero que hará es anular la concesión de la instalación, por lo que el activo gasístico se quedará en modo hibernación hasta nueva orden, según ha explicado la vicepresidenta Soraya Sáenz de Santamaría.
El almacén inactivo pasará a manos de Enagás, operador del sistema gasístico. La empresa que preside Antonio Llardén no asumirá más gastos que los de mantenimiento de las instalaciones. Fuentes cercanas al operador del gas en España afirman que la medida no es tan negativa para la compañía ya que no tendrán que afrontar grandes gastos por ello.
Operación financiera
La banca, en concreto Santander, Caixabank y Bankia, adelantarán el dinero para que el Gobierno abone la indemnización. Para que la banca pueda recibir el dinero, ha llegado a un acuerdo con el Gobierno por el que irá percibiendo la devolución del crédito a través de la tarifa del gas. El dinero se presta a Enagás, abona la indemnización y después las empresas del sistema gasístico devolverán al operador vía factura. El plazo es muy largo, a 30 años, por lo que las subidas del gas no tendrían porque ser muy acentuadas.
A los 1.350 millones habrá que sumar los intereses que pide la banca que se podrían acercar al 4%, según fuentes cercanas a la operación.
En total, los poco más de siete millones de consumidores de gas tendrán que rascarse el bolsillo y abonar cada uno unos 200 euros durante todos estos año. Una cifra que repartida no es mucha, pero que no debería afrontar el consumidor bajo ningún concepto, sobre todo cuando se trata de una pésima gestión de ACS y una mala regulación por parte del Gobierno socialista y el actual del PP.
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