El Gobierno de PSOE y Sumar se ha comprometido con sus socios parlamentarios de izquierda a aprobar un decreto ley para prorrogar un año más el impuesto a las empresas energéticas, que caduca el próximo 31 de diciembre.
Es el acuerdo de la reunión que Podemos exigió al Gobierno para dar su apoyo a la reforma fiscal y a la que ni PNV ni Junts han asistido, por lo que, de momento, no están garantizados los votos para convalidar ese futuro decreto ley.
La idea original de los morados era redactar una proposición de ley, pero finalmente se ha decidido apostar por un decreto que prorrogue la tasa con su diseño actual de prestación patrimonial de carácter no tributario, que fue a lo que el Gobierno se comprometió con ERC y Bildu y BNG.
Eso sí, la vía del decreto ley no permite aprobar impuestos, que era una condición 'sine qua non' del PNV para aceptarlo, ya que la figura actual impide que las haciendas forales de el País Vasco y Navarra puedan gestionar lo recaudado.
Aunque fuentes presentes en la reunión han destacado el buen ambiente del encuentro, ahora falta que se sumen al pacto PNV y Junts para que cuadren los números. Se prevé convocar a estas formaciones la semana que viene, coincidiendo con la llegada al Pleno del Congreso de las enmiendas del Senado a la ley del impuesto mínimo global que introduce parte de la reforma fiscal auspiciada por el Ejecutivo.
El impuesto a las energéticas para PNV y Junts
A juicio de Podemos, que es la formación que exigió esta reunión para diseñar una ley con el impuesto, la ausencia de PNV y Junts al encuentro supone un "incumplimiento" del acuerdo al que llegó con el Gobierno, al que le ha espetado "falta de compromiso" para aprobar el tributo.
Deja tu comentario
Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Todos los campos son obligatorios